REDACCIÓN: LATRIBUNAMADRIDISTA.COM.
El delantero del Real Madrid Castilla, Álvaro Morata, a caballo entre el primer equipo y el primer filial blanco es sinónimo de triunfo para el equipo de Alberto Toril. Así, cada vez que Morata juega con los del Alfredo Di Stefano, el Real Madrid Castilla suele saldar sus partidos con triunfos, a lo sumo, empate, descartando en la mayoría de las ocasiones una derrota.
De los 13 partidos que ha disputado, el segundo equipo de la casa blanca ha ganado 7, ha empatado 3 y tan sólo ha perdido en 3 ocasiones, sumando 24 puntos de 39, es decir, un 61,5% de los puntos en juego. Una de esas derrotas, vino en el Mini Estadi, ante el Barcelona B y después de una actuación arbitral lamentable que lastró las opciones merengues.
Sin embargo, cuando el ya jugador del primer equipo se ausenta de las alineaciones de Toril, el panorama se vuelve desolador. El filial solamente ha sumado 14 de los 54 puntos posibles sin el delantero (el 25,9% de los puntos en juego), lo que demuestra la importancia de Morata en el Castilla.
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