La gala del Balón de Oro, una broma de mal gusto

Redacción: Sergio Hervás

France Football presentó en la noche de ayer a los premiados de la gala del Balón de Oro, en un espectáculo absolutamente bochornoso e inverosímil.

Eran las 20h peninsulares y, aunque ya se habían anunciado algunas posiciones de los nominados al gran premio de la noche, lo bueno empezaba ahora. Llegaba el momento de conocer quién sería el mejor portero del mundo, el mejor equipo, el mejor jugador y jugadora del mundo, el Golden Boy y el mejor gol de la temporada… aunque, a decir verdad, este último premio era el único que guardaba algo de misterio, dado que en el resto previsiblemente arrasaría el Real Madrid y sus futbolistas.

La primera broma de la noche

El primer reconocimiento de la noche sería el denominado Trofeo Kopa, que determinaría quién había sido el mejor futbolista menor de 21 años en la pasada campaña. Teniendo en cuenta sus 40 encuentros disputados en su primera temporada como madridista, en los que anotó 2 goles y concedió 2 asistencias, además de convertirse en pieza clave para Ancelotti y asumir galones en las remontadas blancas, Eduardo Camavinga se postulaba como principal favorito a la obtención del galardón individual. Junto a él, se encontraban también nominados grandes futbolistas como: Judes Bellingham, un jugón que a sus 19 años de edad ya carga con el peso de ser el jugador franquicia en todo un Borussia Dortmund y que, observando su proyección va a dar mucho que hablar; Jamal Musiala, un joven alemán que ha logrado hacerse un hueco en todo un Bayern de Múnich y convertirse en indiscutible para Nagelsmann; y Gavi, el joven canterano culé en el que confió Luis Enrique para llamarle a la selección y que, a partir de ahí, comenzó a hacerse oír en can Barça… entre otros.

Ronaldo, encargado de leer el nombre del ganador, pronunció el nombre del futbolista azulgrana para sorpresa de todos. Para France Football el mejor joven del año es un futbolista que no ha ganado absolutamente nada colectivamente; que, además, fue eliminado de la máxima competición continental de clubes a la primera de cambio; y que, para colmo, cayó goleado y prácticamente humillado en su propia casa ante el “todopoderoso” Borussia Mönchengladbach. Quizás, ayer, en la gala del balón de oro, habría que haber proyectado un vídeo, a modo de recordatorio, del pase magistral de Camavinga a Benzema en el primero de Rodrygo frente al City; quizás debería haberse mostrado la asistencia de Camavinga al propio Rodrygo, en una de sus primeras apariciones con la elástica blanca, para remontar ante el Inter de Milán, conjunto al que, por cierto, este mismo año ni Gavi ni su equipo han sido capaz de vencer en los dos enfrentamientos ante los italianos; quizás deberían haberse enseñado los desplazamientos, los cambios de ritmo, su capacidad para encontrar el último pase o para romper líneas de don Eduardo Camavinga, el mejor futbolista joven de la pasada campaña y uno de los mejores centrocampistas de la próxima década, digan lo que digan.

La segunda inocentada fue para el bueno de Vini Jr

Tras la broma del Golden Boy, llegaba la hora de anunciar a los 10 mejores futbolistas del mundo. Lo que ocurrió en la noche de ayer, es que no quedó muy claro si la gala que se estaba presenciando era la del Balón de Oro o, más bien, se trataba de la gala Inocente, Inocenteque suele tener lugar el 28 de diciembre. Más si cabe, cuando se oficializa que Modric es el noveno, Vini Jr el octavo y Thibaut Courtois, mejor portero del mundo, el séptimo clasificado en el top 10 de mejores futbolistas del mundo. Sobre todo, llamó poderosamente la atención el lugar que ocupó el brasileño en el ranking. Un jugador que acabó la temporada con un extraordinario balance de 22 goles y 20 asistencias en 52 partidos disputados; un jugador que anotó el gol en la final de la Champions; un jugador que humilló en velocidad a Walker y al propio Guardiola en el Etihad; un jugador que puso patas arriba la zaga del PSG para comandar la remontada madridista ante el célebre club estado; un jugador que se convirtió en el gran atractivo de LaLiga y que, hace tan solo unas semanas, fue nombrado mejor joven de la Champions… ese mismo jugador quedó por detrás, en la clasificación, de futbolistas como Mbappé, Mané, De Bruyne, Lewandowski o Salah.

Increíble, increíble que no se valore que un chaval de tan solo 21 años se haya convertido en la estrella del vigente campeón de liga y Champions; increíble que se vuelva a minusvalorar a un futbolista que desde su asentamiento en la élite no ha hecho otra cosa que callar las bocas de todos los que algún día se rieron de él. Pero no queda otra, Vini, tendrás que seguir trabajando día a días, como lo has hecho desde que te enfundaste la elástica madridista, como sigues haciendo día a día a pesar de haberte convertido en una estrella del fútbol mundial; tendrás que seguir callando bocas hasta levantar ese Balón de Oro que algún día conseguirás. Los madridistas siguen estando muy orgullosos de su niño maravilla, digan lo que digan en una gala muy poco seria y creíble.

Real Madrid CF, ¿tercer mejor equipo del mundo?

Tras la coronación de Thibaut Courtois como mejor guardameta del planeta y, haciendo los honores a la entrega del Balón de Oro a Benzema como mejor futbolista del mundo, France Football entregó el premio menos merecido de la historia. Se trataba del reconocimiento al mejor equipo de esta pasada campaña, un premio que, para ser honestos, parecía hecho para el club más laureado de la historia, es decir, para el Real Madrid. Teniendo en cuenta que los blancos levantaron ni más ni menos que su trigésimo quinta liga y su decimocuarta Champions, además de una Supercopa de España y otra de Europa, que muchos parecen olvidar, el club merengue tenía todas las papeletas para el galardón. Sin embargo, para sorpresa e indignación del mundo del fútbol al completo, el premio fue otorgado al Manchester City. Sí, el Manchester City, ese club que, como gran argumento para la obtención del título, había levantado la Premier League. Ese mismo club al que el Real Madrid venció con una remontada histórica en otra noche mágica en el Santiago Bernabéu.

Asimismo, lo más humillante para el rey de Europa no fue el hecho de no recibir el premio, sino que, para colmo, quedó en tercera posición. Sí, efectivamente, lo que leen, el campeón de Europa y de España quedó relegado a una misera tercera posición por detrás de dos clubes, City y Liverpool, a los que los blancos vencieron en la pasada campaña.

Vergonzoso, indignante y poco serio, no existen mejores calificativos para definir la gala de pantomima que tuvo lugar en la noche de ayer en París. Sí, en París, qué paradójico, ¿no?, en esa misma ciudad donde hace unos meses el mejor club del mundo, el Real Madrid, se coronó por decimocuarta vez en la historia, como rey legítimo del viejo continente.

¿Qué es el lado bueno de la historia?

Como colofón final a este artículo, cabe hacer mención especial al mejor portero el mundo, a don Thibaut Courtois. En cuanto al nombramiento de Karim Benzema como mejor jugador del mundo no existía lugar a la duda, pero en estos últimos días sí que se ha barajado la posibilidad de que Courtois no fuera reconocido con el Trofeo Yashin, como mejor arquero de la pasada campaña. Y, visto lo visto en la gala de ayer habrían sido capaces.

No obstante, Thibaut Courtois fue nombrado y reconocido, de una vez por todas, que ya era hora, como mejor portero del planeta fútbol. Sí, señores sí, mejor portero del mundo, por si cabía alguna duda. Thibaut alzó el premio por todos los que le tiraron ratas en el Cívitas; alzó el premio por todos los que hicieron todo tipo de barbaridades sobre su placa en las inmediaciones del estadio rojiblanco, y por todos los que permitieron y alentaron que aquello sucediese; en definitiva, Thibaut alzó el premio para hacerle saber al mundo entero lo que implica estar en el lado bueno de la historia.