El camino hacia la quinta Copa del Rey seguida está a dos pasos. Salvado el primero, hoy toca el Iberostar Tenerife en un enfrentamiento sin precedentes en este torneo pero muy reciente en la Liga Endesa, donde se vieron las caras el pasado domingo en Madrid con victoria blanca por 89-76. Será el tercero de la temporada una vez que el conjunto que dirige Laso se impusiera también en la cancha tinerfeña por 74-84.
LASO HA GANADO LAS CINCO SEMIFINALES DE COPA QUE HA DIRIGIDO AL MADRID.
El Real Madrid conoce muy bien la competición. Es el actual campeón, ganador de las últimas cuatro ediciones y ha vencido en las últimas siete semifinales que ha disputado. Pero solo con la historia no se gana y los madridistas lo saben. Su rival atraviesa también el mejor momento de su historia, nunca antes había llegado tan lejos en la Copa y a buen seguro que contarán con un gran apoyo en las gradas del Gran Canaria Arena.
Nuevo examen ofensivo
Si el Unicaja contaba con la mejor defensa de la Liga, el Iberostar Tenerife le sigue de cerca con la segunda mejor (encaja 75,5 puntos por partido). Otro exigente test para el ataque blanco, el único que supera los 90 de media. Campazzo, por el actual campeón, será uno de los nombres propios del partido. En cuartos de final firmó su mejor actuación con la camiseta del Real Madrid con 33 de valoración (18 puntos y 7 asistencias) y en duelos directos contra este equipo canario ha sido el mejor promediando 12,5 puntos y 22 de valoración.
Enfrente un bloque sólido y compacto cuya fuerza radica en el conjunto, como demostró ante el Valencia Basket. Ponitka y Abromaitis lideraron al equipo, que tuvo a siete jugadores en dobles dígitos de valoración. 40 minutos separan al Real Madrid de luchar por seguir haciendo historia.
