Redacción: Álvaro Quetglas/ Latribunamadridista.com
El centrocampista del Real Madrid, Luka Modric, demostró una vez más que no importan los años en el fútbol. Modric, con 35 años, volvió a dar a una lección de fútbol en el encuentro ante el Atalanta y fue decisivo en la victoria de los de Zidane, que estarán en el sorteo de los cuartos de final de este viernes.
Modric, tras finalizar el encuentro, recibió en el Alfredo Di Stéfano el premio como Mejor Jugador del partido.