Inesperado resultado. Rafa Nadal perdió ante Martin Klizan en los cuartos de final del Torneo 500 de Pekín. En tres sets y mas de dos horas y media se dio por finiquitado el partido. 6-7, 6-4 y 6-3 fue el resultado de un duelo donde Rafa no supo nunca controlarlo y se vio ampliamente superado en varias fases del encuentro. En el primer set la igualdad fue la nota dominante hasta que Klizan le rompió a Nadal en el quinto juego. Con 5-4 y saque le pudo los nervios para acabar cediendo en el tie-break. Todo parecía indicar que el eslovaco se vendría abajo y no opondría mucha resistencia. Pero no fue así.
Klizan seguía golpeando y yendo a la red cada vez que podía. Su condición de zurdo incomoda a Nadal (como ya se vio en sus dos duelos previos donde Nadal cedió un set en cada partido) y no se encontraba nada cómodo en la pista. Aún rompiendo el saque del eslovaco y con 4-2 las sensaciones no eran las mejores para el manacorí. Aun así, todos dábamos el duelo por finiquitado. Si no se hubiese escapado esa bola de break para ponerse 5-2 arriba con saque todo hubiese sido muy distinto. Pero con 4-3 todo se vino abajo, perdiendo Rafa 4 juegos seguidos y, por ende, el set. Nadal se vino abajo de forma sonrojante. Una pista que le vine muy mal y su falta de ritmo parecían clave en sus bajas sensaciones.
En la tercera manga se repitió la historia. Nadal volvió a romper con un buen juego al resto y se pusó 3-2 arriba. Parecía que esta vez sí; el partido lo encarrilaría para pasar de ronda. Pero Klizan estaba en estado de gracia y muchas de sus golpes iban a la líneas. Le rompe en blanco e iguala a 3. A partir de ahí, un vendaval. Otros tres juegos seguidos para cerrar el set y el partido. El 56 del mundo derrotó a Nadal cuando nadie lo esperaba. Un partido que puso en evidencia la falta de rodaje del manacorí. No se esperaba el triunfo en Pekín pero quizás su presencia en la final se daba por segura. Un resultado que no es preocupante en exceso. Hay que mirar los puntos buenos. Nadal no jugó mal. Peleo todo lo que pudo pero se le notó el parón de tres meses. En Shanghai tendrá una nueva opurtunidad.
Djokovic y Murray, sin problemas
El número uno del mundo no tuvo excesivos problemas para derrotar al búlgaro Grigor Dimitrov en dos mangas (6-2, 6-4). Su rival en cuartos será Andy Murray que derrotó al campeón del Us Open, Marin Cilic. Lo hizo, además, con mucha facilidad. Un 6-1 y 6-4 le lleva a las semifinales. donde aguarda otro duelo entre el serbio y el escocés. Un partido siempre interesante de ver. La otra semifinal la jugarán Martin Klizan y Tomas Berdych que venció Isner por 6-1 y 6-4.