Partido trampa para el conjunto madridista, que según las estadísticas y la historia deberían obtener una victoria segura. Pero ya avisó Laso en la previa: “El Efes es un equipo incómodo y peligroso”. Favoritos a principios de temporada, los turcos no han terminado de mostrar todo su potencial. Cinco victorias en 19 partidos, encadenan siete derrotas en los últimos nueve. En las antípodas del Real Madrid, que sumó siete triunfos seguidos antes de la pasada jornada.
El feudo blanco es maldito para el Efes. Los blancos han ganado en las 10 últimas visitas del equipo turco y el balance total entre ambos equipos es de 19-6 a su favor. En octubre ya se vieron las caras en Estambul con una victoria clara del Real Madrid por 74-88. El tríoDoncic-Randolph-Ayón fue imparable aquel día con 83 de valoración. Pero el Efes ha cambiado, empezando por su entrenador. Ataman ha tomado el testigo de Perasovic y la llegada de Toney Douglas y Zoran Dragic ha dado mayor amenaza a un juego exterior en el que destacan también McCollum y Simon.
La fuerza de equipo
Es lo que tendrá imponer el Real Madrid. La baja de uno es suplida a la perfección por otro, como hizo Rudy contra el Baskonia o Carroll tirando del equipo en San Sebastián con un estratosférico tercer cuarto. Enfrente estará la segunda peor defensa de la competición (85,3 puntos de media). Como contrapartida, exigirá el máximo a los blancos en el plano físico. Los otomanos cuentan con jugadores muy fuertes en el juego interior, caso de Dunston, Motum o Stimac. Último partido del mes en la Euroliga.