Redacción: Luis Miguel Plá.
El Trofeo Bernabéu siempre ha sido la presentación oficial del equipo ante su afición, el partido en el que se dejaba de hacer probaturas y se sacaba a jugar a un equipo reconocible, un equipo que perfectamente podría ser titular en cualquier partido de Liga y que hiciera divertirse a la afición al máximo. Por eso, el equipo que pueda sacar Benítez mañana contra el Galatasaray puede ser un reflejo del que salga el próximo fin de semana en Gijón y, por eso, es interesante saber cual será el portero que defienda los palos del Coliseo Blanco por primera vez este curso.
La pretemporada ha sido muy positiva tanto para Keylor Navas como para Kio Casilla. Ambos partían de una situación difícil, la de hacer olvidar a Casillas, pero cada uno de ellos ha sabido responder a la presión, hasta el punto de que el fichaje de De Gea haya dejado de ser una prioridad en los despachos.
La lógica de los minutos dice que será Keylor el que juegue mañana y, seguramente, en el debut liguero, ya que el costarricense ha sido el que más tiempo ha pasado sobre el terreno de juego con Benítez. Keylor ha ido creciendo a medida que lo hacía el equipo, y las actuaciones nerviosas de mediados de julio, han dado paso a sobresalientes partidos como el que jugó contra el Bayern Munich.
Por su parte Kiko Casilla ha ofrecido lo que ya se sabía que tenía, seriedad y sobriedad. El ex del Espanyol es un portero al que difícilmente ves cometiendo un fallo y que da una seguridad en los balones elevados que hacía mucho tiempo que no se sentía en el equipo blanco.
La pretemporada se acaba y con ellas las probaturas, y en el momento de las decisiones es cuando Benítez tiene que elegir que es lo mejor para el equipo, empezando por la portería, decidiendo entre Keylor y Casilla.