Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista
El segundo entrenador del Real Madrid Zinedine Zidane mantuvo un encuentro con periodistas en Abu Dhabi en el que repasó la actualidad del club blanco, desde la situación de Gareth Bale a la llegada de jugadores como Isco e Illarramendi, pasando por su relación con el italiano Carlo Ancelotti o por el próximo Balón de Oro.
Gareth Bale: «Está bien integrado en el club y todo el mundo lo ha recibido muy bien. Le faltaba un poco de preparación física a su llegada, por lo que al principio su estado físico ha sido algo delicado. Lo único que pasa es que no ha entrenado lo suficiente con el resto del equipo. Tiene mucha fuerza de voluntad y ahora ha comenzado a entrenar. Estará listo”.
El coste de Bale: “Es el mercado. Hay un club que quiere comprar y un club que vende. Se produce una transacción y cuesta lo que cuesta. Es un jugador excepcional y a dar mucho al Real Madrid. Por eso fue elegido”.
Balón de Oro, Ribéry o Cristiano Ronaldo: “Lo merecen los dos. Pero yo se lo daría a Franck porque fue fundamental en los tres títulos que consiguió la temporada pasada el Bayern. El problema es que hay un chico que ha hecho 55 goles en una temporada… De todas formas, yo no decido”.
El estado de Banzema: “Cuando un jugador de fútbol tiene mala racha, es difícil. Pierde confianza y frescura. Pero nunca perderá sus cualidades. Se le pide que marque goles y en este momento no está marcando, por eso está siendo criticado. Pero no se puede cuestionar al jugador o su trabajo en el real Madrid, además Benzema nunca se rinde. Está presente”.
La competencia de Morata: “Es bueno que haya jugadores que estén creciendo. Benzema está pasando un periodo malo. Esto pasa. Se habla de 1.217 minutos sin marcar con Francia. Es verdad que es mucho tiempo, pero Benzema es un jugador que se entrega, que no se rinde, que trabaja para mejorar. Va a volver. Es necesario que marque un par de goles pronto”.
Ser entrenador: “Sueño con ser el entrenador de la selección francesa algún día. Esto no es algo que quiero ahora mismo. Es algo para el futuro. Siempre he sido un hombre paciente y trabajar en Madrid con Carlo es una gran manera de aprender antes de empezar como primer entrenador, que es mi objetivo».
¿Por qué decidió serlo?: “No quería ser entrenador cuando terminé mi carrera, pero de aquello han pasado seis o siete años, y comencé a sentir que quería volver a este fantástico deporte. Yo siempre me sentí cómodo en el campo, y ahí es donde siento que puedo ser más útil para otras personas y jugadores. Hablé con mucha gente y ví todas las opciones que tenía, y tome la decisión de volver al futbol”.
Su actual cargo: “Soy uno de los dos asistentes. Clement se ocupa de la preparación física, y yo estoy más para discutir el equipo, su estructura, y para trabajar con los jugadores. Todo se hace en paralelo con Ancelotti pero cada uno tiene su propio papel. ¿Estoy disfrutando? Por supuesto. Es una buena experiencia empezar así, porque es lo que quiero hacer más adelante en mi vida”.
Su relación con Ancelotti: “He trabajado con muchos grandes entrenadores y he cogido partes de cada uno, y es por esto por lo que creo que mis habilidades como entrenador están completas. Carlo ha evolucionado mucho. Era un entrenador joven cuando trabaje con él por primera vez, ahora tiene mucha más experiencia. Es una gran experiencia trabajar con un tipo como Carlo, es un entrenador fantástico para basarme en lo que quiero hacer en el futuro”.
El inicio de temporada: «En el Madrid existe una gran exigencia, siempre se pide mucho. Siempre quieren más. Los resultados están ahí, creo que son bueno pero también podeos mejorar en el juego».
Comparaciones con Isco: “Ha habido comparaciones con Isco pero también las hubo antes, ocurrió cuando empezaba mi carrera. La gente me comparaba con Platini por la posición en la que jugábamos ambos, y la conexión con la Juventus, ocurrió antes y seguirá ocurriendo”.
Su mejor recuerdo del futbol: “No es muy original, pero cuando gané el Mundial con Francia en 1998”.
Compañero favorito: “Ronaldo. Tenía unas cualidades increíbles y sus movimientos como delantero eran impredecibles y únicos”.
Gol favorito: “Todo el mundo habla del que marqué en la final de la Champions ante el Bayer Leverkusen, pero el que siempre tengo presente es uno que no es muy recordado. Fue cuando estaba jugando en Marsella con Francia, en un amistoso contra Noruega que empatamos 3-3.
Oponente más duro: “Maldini. Siempre era difícil jugar contra él”.
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