Mari Sol Echeverría, herida muy grave en Santiago, se enteró de que está embarazada

Redacción: La Voz de Galicia

María Sol Echeverría Echeverri es una de las pasajeras del tren que el pasado día 24 interrumpió de forma trágica su trayecto cuando apenas le quedaban cuatro kilómetros para llegar a la estación de Santiago, su destino, aunque el del Alvia estaba en Ferrol. Y la suya es una de esas historias personales que se pueden contar con alivio. Ayer pasó a planta y con la tranquilidad de que su hijo de corta edad también ha sobrevivido a la tragedia. Pero, además, con la noticia de que espera otro vástago. Así lo revelaron las pruebas que se le practicaron en el Clínico de Santiago tras ser ingresada.

La vida le ha dado un vuelco importante en pocas horas, y no solo porque ahora sabe que volverá a ser madre, sino también porque, al ingresar, los médicos dijeron que era una de las víctimas que había llegado en un estado más grave, por lo que fue internada en una unidad de críticos del CHUS. Pero ayer, debido a su buena evolución, fue trasladada a la planta de Neurocirugía del Clínico compostelano, donde ahora se recupera en compañía de su familia.

A principios del 2014, María Sol Echeverría podrá celebrar con felicidad que es madre de nuevo, después de haber sobrevivido a una tragedia que conmocionó al mundo y que ha dejado 78 muertes. La suya es, sin duda, una de las historias de supervivencia más impactantes por su inesperado desenlace.

 

Tendida en el suelo

Todavía convaleciente, esta pasajera del Alvia recibió ayer a Efe en este centro médico. Según la agencia, les pidió brevedad para ofrecerles su relato y comprensión para su dolor. Desde su habitación del centro asistencial santiagués afirma que esta ha sido una auténtica tragedia, tan increíble que parece irreal.

Pero, desgraciadamente, es verídica y María Sol recuerda haber estado tendida en el suelo después de que el tren Alvia que cubría la ruta entre Madrid y Ferrol descarrilase a la altura de Angrois, muy cerca de la estación compostelana.

A su lado, en esas vías de la parroquia compostelana, la llamada zona cero, se encontraba precisamente el maquinista, Francisco José Garzón Amo, del que comenta que, completamente ensangrentado, repetía una y otra vez: «Perdón, perdón, perdón, perdón…».

 

Cuarenta ingresados

María Sol Echeverría nunca olvidará las circunstancias en las que se enteró de su nuevo embarazo. Junto a ella, continúan hospitalizadas en el CHUS otras 39 personas heridas en el mismo siniestro ferroviario, después de que otras dos recibiesen ayer el alta.

Veintisiete de los ingresados actualmente (en concreto, 24 adultos y 3 niños) continúan en estado crítico, según el último parte ofrecido por el complejo hospitalario compostelano.

Su buena evolución permitió ayer trasladarla a una planta del Clínico