Redacción: Jorge Gómez-Manzanilla-Pedro Cánovas-Abel Alaminos/LaNocheDelDeporteEspañolTV-deporteolimpico.net-blogolimpico.com/ Imágenes: Diario de Navarra
A pesar del Oro Olímpico ganado en K-2, 500 metros, otra de las tantas que hacía el COI y que sigue haciendo sin justificación ni fundamento alguno, fue extinguir los K-2 500 metros y transformarlo, así lo vendieron ellos, por una distancia de 200 metros, casi anaeróbica y donde la frecuencia de la palada era mucho mayor pasando de las 140 por minuto a las 165.
Sin embargo, tanto Saúl como su inseparable Perucho Pérez Rial aceptaron el reto y apostaron por los 200 metros modificando lógicamente la forma de remar e incluso controlaron el tema del peso, en el caso de Saúl, no pasando de los 95 kilos.
Tras hacer un ciclo olímpico en condiciones ganando el campeones de Europa en 2009 y 2010 y siendo Plata en el Mundial en 2009 y 2010, además de 2 Oros en Relevos en 4 x 200, tanto Saúl como Perucho tuvieron que competir en el preolímpico de Poznan (Polonia) y fue en ese momento, cuando todo el trabajo de tres años se vino abajo.
Y eso que empezaron a la perfección pero una inesperada ola atascó todo el engranaje y aunque quedaba parte de la prueba no pudieron recuperar y del primer puesto pasaron al último y lógicamente dijeron adiós a la clasificación olímpica.
Sin duda, fue el mayor revés para esta pareja de ORO y por ello, se optó por la única solución, luchar en individual por una plaza y el elegido fue Saúl Craviotto que haría la misma distancia, 200 metros y siendo lógicamente K-1 y no K-2.
El trabajo estaba hecho, eso sí y aunque Saúl iría sólo, la estrategia a seguir, ese aumento de la frecuencia de palada y una buena salida eran fundamentales para optar a la medalla olímpica.
Y llegó a Londres y se metió en la final con un tiempo de 35.552 algo que no lo lograron algunos especialistas como el polaco Sieminowski. Su mejor amigo y compañero, Perucho, lo felicitó por teléfono y le animó para conquistar una medalla que en parte, era parte de Perucho ya que durante el ciclo olímpico se habían preparado para esos 200 metros.
Y Saúl lo hizo y eso que salió mal pero logró remontar algo casi impropio en una distancia de 200 metros pero el ímpetu y las ganas del policía gijonés pudieron contra todos los inconvenientes superando a todos los rivales menos al Oro Olímpico, el anfitrión Ed Mc Keever que solamente superó a Craviotto en 294 milésimas. Medalla de Plata, parte de Saúl, la segunda olímpica que lograba (le quedaban por conquistar dos más en Río 2016) y parte de su amigo, Perucho.