Redacción: Víctor Chico Mármol
Normalmente me tocaría escribir quien ha jugado mal, quien ha jugador regular y quien ha sido el mejor del partido, pero esta vez es imposible decir que jugador ha sido el peor, y quien simplemente ha estado regular, más que nada porque horas después del partido sigo sin saber dónde ha estado el Real Madrid de 18:15 a 20:15, porque de lo que estoy seguro es de que por el Santiago Bernabéu no ha aparecido.
El Real Madrid esta noche no ha jugado a nada, ni ha dado señales de vida que nos hicieran pensar que estaban en el terreno de juego, es como si el FC Barcelona hubiera jugado una «pachanga» contra un equipo «amateur», que no se jugaba nada y que les daba igual el resultado, y eso no es el Real Madrid. Hoy no se salva nadie, todos han estado lamentables, desde los jugadores hasta el cuerpo técnico. Deben mirarse todos a la cara y dejarse los dardos entre jugadores y entrenador, todos deben remar hacía el mismo lado, el Real Madrid está por encima de todos los egos personales, y la afición se merece una disculpa, y no hay mejor forma que pedir perdón en el terreno de juego, demostrando que somos el Real Madrid.
Creo que no hay que pedir la dimisión de nadie, ahora la afición debe de estar más que nunca con el equipo, y sé que eso es realmente difícil, porque en estos momentos nos sentimos traicionados. Pero estos jugadores se merecen otra oportunidad, aunque deben de empezar a cambiar desde ya, no pueden permitirse otro desastre como el de esta noche. Hoy muchos aficionados se han ido cabreados e incluso sin cenar a la cama, porque perder de esta forma ante el máximo rival es un palo muy duro.
No es una solución estar cambiando de técnico todas las temporadas, el equipo necesita estabilidad, y debemos recordar que hace tan solo 1 año parecía que el Real Madrid iba a ganar sobrado todos los títulos y que por el contrario el Barcelona ya lo había perdido todo y Luis Enrique debía dimitir, y todos sabemos el final de aquella historia. Ahora le toca al equipo hacer que esta historia tenga un final feliz.