Redacción : Laura Garmendia
Aunque el Real Madrid pareció entrar más enchufado al partido contra el Khimki ruso, se complicó la vida en Europa al perder en casa por 82 – 85, en un partido donde no se encontró a gusto donde le pone cuesta arriba la clasificación para el Top- 16 al vigente campeón.
De empezar el partido con el marcador 4-0 , el equipo ruso hizo dar un vuelco a la tabla, dejando constancia de su efectividad (4-7). Los blancos tardaron en coger la delantera en el marcador sin durarles demasiado ya que los triples no ayudaron mucho ( 1 de 7 en triples).
La calidad del equipo ruso hizo que el marcador se colocara preocupante en el minuto 15 (27-37), ya que Rimas Kurtinaitis, entrenador del Khimki, demostró su gran fondo de armario con muchas rotaciones. El equipo blanco elaboró bien la ofensiva pero la finalización le falló mucho, ya que los balones no quisieron entrar.
Un triple del “Chacho” Rodríguez, seguido de una jugada individual hicieron que acortaran la ventaja del equipo ruso y les permitieron seguir enganchados al partidos sin tanto dramatismo.
Al llegar al descanso sabían que habría que mejorar en defensa y en ataque para superar la primera prueba de la temporada.
Con mucho esfuerzo, los blancos intentaron salir de la segunda crisis que se les presentaba, logrando llegar a la final enganchado aún al partido con un marcador en el tercer cuarto de 63-66.
Teniendo ya la presión, los triples tirados de “Chacho” Rodríguez y Sergio Llull fueron contrarrestados por dos de Monia. En el minuto 37 con una técnica a Laso por prestar y con los triples que fallaba el Real Madrid puso el marcador 74-79.
Las fuerzas de los blancos se comenzaron a agotar al fallar un triple Sergio Llull con un marcador de 77-81 quedando un minuto y medio para el final. Con las faltas personales los tiros libres de los blancos no encontraron la solución quedándose el marcador en 82-85, por lo que hace que se le compliquen un poco las cosas a los nuestros en la Euroliga.