Roberto Palomar opinó sobre Chicharito en la Cadena Cope, de cómo llegó y cómo apareció en el momento más importante de la temporada.
Mejora: «Ya no parece una mascota, parece un delantero centro, ni siquiera parece ya un suplente sino que se abren encuestas y debates sobre si debe jugar Benzema o Don Javier Hernández ‘Chicharito’. El fútbol tiene estas cosas, que puedes pasar de llevar el botijo a que te lo sirvan. Chicharito sigue siendo el mismo que entró de puntillas en Valdebebas y solo piensa en que llegue el miércoles para volver a jugar».
Llegada: «Chicharito tiene nombre de mascota y aspecto de no haber roto un plato en su vida. Más que un jugador a préstamo al Real Madrid se lo dieron en adopción. Llegó a Valdebebas, llamó con los nudillos a la puerta de Ancelotti y el míster le dijo: ‘¿Tú dónde vas niño?’. ‘Nada, que soy Chicharito’, contestó el pequeño. Le pusieron a entrenar con cuidado de no hacerle daño con un pelotazo».
El momento clave: «Así fueron pasando los meses hasta que un buen día Ancelotti miró alrededor y no vio nada más que aquel tipo con aspecto de colegial y ficha del primer equipo para ser alineado ante el Atlético de Madrid. Chicharito salió, fue el mejor y marcó y entonces empezaron a llamarlo Javier, que es su verdadero nombre, y volvió a salir ante el Celta y volvió a marcar».