Redacción: Lorena Benito-Latribunamadridista.com
El galés se sumó a la fiesta blanca en el partido que enfrentaba al Madrid contra el Ludogorets, en el Santiago Bernabéu.
Bale se sacó un gran cabezazo para marcar el segundo tanto de los blancos en la última noche de la fase de grupos de la Champions League. Gareth no solo marcó, sino que también destacó en otros lances del partido.
Pudo haber realizado un doblete si el árbitro hubiera dejado que subiera al luminoso el primer tanto del Real Madrid, que fue anulado por una clarísima mano de Marcelinho. Pero Bale, lejos de venirse abajo por ese tanto anulado, siguió intentándolo y, de nuevo, en un perfecto saque de esquina lanzado por el alemán, Toni Kroos, llegó el deseado tanto para el galo.