Redacción: Álvaro Quetglas/ La tribuna madridista
Sergio Ramos fichó por el Real Madrid al final del verano del 2005 procedente del Sevilla. El de Camas se convertía entonces en jugador merengue, pero lo que no sabía es que, desde entonces, cada visita con el Real Madrid al Sánchez Pizjuán se iba a convertir en una pesadilla.
Desde entonces, como informa AS, cada ocasión en que el capitán ha visitado la capital hispalense ha sido recibido entre los ambientes más hostiles que se recuerdan en un campo de fútbol. Ramos ya ha marcado algunos tantos ante el Sevilla a pesar de tenerlo todo en contra. Por tanto, el central español no se asusta ante ambientes de este tipo y el de esta noche será un episodio más, donde seguro parte de la afición sevillista le reprochara y recriminará.