Segundo clásico del año y primero en Euroliga. El primero se saldó con la victoria madridista en la Supercopa de España y hoy, los dos equipos vuelven a medirse las caras en el Palau a las 21:00.
Muchas dudas son las que faltan por despejar de cara al Clásico que se disputará en Euroliga. No solo sobre el nivel de juego en el que se encuentran ambos equipos para este choque, sino también fuera de las pistas. El Real Madrid ha viajado hasta la ciudad condal sin Carroll por molestias en la rodilla, y sin Caseur, aun en cuarentena por Covid-19.
Por su parte, el Barcelona no ha manifestado pista alguna sobre si Mirotic jugará o no esta noche, y es que hay debate con este tema. Según el protocolo de Euroliga, han de pasar 14 días desde que se detectase el positivo, sin embargo, no sabemos cuál fue la fecha exacta en la que Mirotic recibió la noticia y por tanto, ante ese vacío podría darse la situación de tenerlo hoy en la pista.
El Barcelona necesita a Mirotic más de lo que muchos quieren admitir. Sin él, en el pasado partido contra Baskonia en Euroliga, los de Jasikevicius sufrieron mucho para desatascar situaciones de bloqueo con lanzamiento exterior. El Real Madrid de Laso, tampoco está pasando por su mejor momento, y la Euroliga se está convirtiendo en su quimera en este arranque de temporada. Solo con una victoria en la competición europea, los de Laso llegan al Palau para intentar revertir esta mala situación.
Sin público en un Palau frio. Así va a ser el encuentro de hoy, pero eso debe ser algo a lo que los dos equipos deben empezar a tener como algo habitual. Que sí, que el ambiente es un 50% como ya dijo ayer en la previa el técnico blaugrana, pero es que llevamos ya más de 6 meses sin público en los grandes eventos y ponerlo como excusa es algo inaceptable. Que sí, que a todos nos encantaría disfrutarlo de nuevo y ver pabellones llenos, pero peor sería no poder jugar, y por ahora es lo que toca, y el que sepa adaptarse a ello y crecerse frente a la soledad en los pabellones tendrá ese plus frente a los que se aferren a la idea de necesitar gente alentándolos para sacar la garra dentro de la cancha.
Madrid y Barcelona, necesitan hoy más que nunca ese cambio dentro dentro de sus filas. El madridismo necesita ver más de Campazzo. El argentino se mantiene en su línea en la mayoría de los partidos pero no está brillando tanto como lo hacía la temporada pasada y eso se nota. Necesita que Garuba se vuelva más ofensivo. El de Azuqueca es una maquina perfectamente engrasada a la hora de coges rebotes y crecerse en la zona defensivamente ante rivales que le superan en envergadura, pero su nueva posición en el 4 aun se le atraganta en lo ofensivo. Ahora con un rol mucho más abierto, necesita afinar puntería sobre todo en tiros liberados desde el perímetro. Y el Madrid necesita a los de siempre como siempre.
Y el Barcelona, también necesita mucho más. Se esperaba que Calathes fuese un revulsivo en las filas blaugranas y por ahora no ha sido esa estrella europea que era dentro del club culé. Necesita sin duda a Mirotic, que es una pieza fundamental dentro del equipo, y necesita que alguien más acompañe a Heurtel en el campo. El francés es de los pocos que puede librarse de críticas y necesita que sus compañeros se contagien de su actitud para el partido de hoy.
Con todo ello, hoy será una prueba de fuego para ambos equipos. La primera para el Madrid, ya que el domingo los blancos tendrán también el derbi frente a Estudiantes. Sin duda el que resulte ganador hoy saldrá bastante reforzado y la derrota va a ser de las que pesan durante varios días para cualquiera de los dos conjuntos.