El domingo llega El Clásico y el Real Madrid está más concentrado que nunca para volver al primer puesto de la tabla y conseguir los tres puntos. Según Marca, Iker Casillas y Sergio Ramos han pedido a sus compañeros que no haya ninguna información sobre el partido.
La plantilla está más unida que nunca y, hasta que termine El Clásico, no van a dejar que se filtre nada, ni que la prensa les pueda descolocar con comentarios ofensivos. Guardar silencio y blindar el vestuario son las premisas.
El equipo saldrá al Camp Nou a ganar y a demostrar que son el mejor equipo del mundo. Ni la prensa, ni los antimadridistas podrán con ellos.