Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista
El pequeño rifirrafe que tuvieron Arjen Robben y Bruno Martins Indi en el entrenamiento del domingo en las instalaciones del Flamengo sigue dando que hablar en el entorno de la selección holandesa. El futbolista del Bayern de Múnich, una de las estrellas indiscutibles del equipo, se revolvió después de que el joven defensa del Feyenoord le agarrara la piernadesde el suelo y pocos instantes después de recibir una fuerte entrada suya.
El gesto llamó la atención de todos, incluso de los miembros del cuerpo técnico, que enseguida quisieron poner paz entre ambos. A Robben no le gustó la agresividad con la que Martins Indi se empleó en ese momento y en el resto del entrenamiento, algo que obedece a las ganas por demostrar cosas del joven zaguero de origen portugués y que le pueden llevar a la titularidad como central zurdo en el partido del viernes ante España. «No pasó nada. Arjen es un gran regateador, pero a veces se cae demasiado», dijo después de que ambos sellaran la paz públicamente.
También De Jong hizo una fuerte entrada a Sneijder, muestra de la tensión va en aumento según se acerca el debut del viernes. Holanda llevará hoy a cabo otro entrenamiento a puerta cerrada en Rio de Janeiro, al igual que mañana, y el miércoles volará hacia Salvador de Bahia. Van Gaal tiene a todos sus jugadores disponibles toda vez que De Guzman parece recuperado a tiempo y poco a poco está integrándose en el trabajo de grupo junto a sus compañeros. La idea del seleccionador oranje sigue siendo apostar por un 5-3-2 para el encuentro frente a España.