Redacción: Latribunamadridista.com / Imágenes: ABC.COM
Como hace cuatro años en el mundial sub 17 de Costa Rica 2014, nuevamente ante Japón, la misma generación nipona que ayer en Francia volvió a tocar la gloria mundial ( campeonas sub 17 en 2014 y campeonas sub 20 en 2018), un combinado asiático que sabe aguantar las embestidas rivales, lo hizo ayer en la final con España, encajando pocos goles y «matando», deportivamente hablando, a su rival a la contra, como ocurrió en la final de ayer, tres zarpazos y final resuelta con el consiguiente mundial sub 20 para el país del Sol Naciente.
Con el guión del partido de la fase de grupos en la cabeza, ahogar la salida de balón de los asiáticas en el medio campo, buscar rápidamente las bandas y finalizar jugadas, España tuvo el dominio del balón, el peso del encuentro en la primera media hora y nada más y nada menos que cuatro ocasiones de gol que no encontraron el premio del gol.
La primera de la mejor jugadora española, Patri Guijarro, Balón de Oro del Mundial sub 20, aprovechando un mal despeje de la guardameta japonesa Stambaugh cuyo rechace le cayó a Guijarro que remató a las manos de dicha guardameta.
La segunda ocasión, minutos después, tras una galopada de Eva Navarro cuyo centro lo remató de cabeza Pina rozando el poste izquierdo del marco rival. La tercera, justo a los dos minutos del cabezazo de Pina, obra de Mayte Oroz cuyo remate lo despejó a córner, otra vez, el muro asiático, Stambaugh.
Sin embargo, antes del gol rival llegó la mejor ocasión de España, en un remate de Candela Andújar que bajo palos sacó Takasaki, justo cuando se cantaba el primer gol del partido. De la posible cara llegó la cruz, en un disparo lejano de Miyazawa que sorprendió a Catalina Coll, ligeramente adelantada, y se coló en las redes españolas (0-1), resultado con el que se llegó al descanso.
En la segunda mitad y aunque el resultado era adverso, España no cambió el guión y salió en busca de su rival y sobre todo, dispuesta a empatar el partido, un premio que no sólo no llegó sino que terminó de condenar a una selección nacional que dejó espacios en defensa ( lógicamente al volcarse sobre el área rival) algo que aprovechó Japón para hacer el (0-2), obra de Takarada y minutos después, el (0-3) por medio de Nagano, mazazo demasiado duro para la rojita sub 20 que eso sí, maquilló el resultado (1-3), con un gol de Candela Andújar a veinte minutos del final.
Incluso, a veinte minutos del final, las pupilas de Pedro López soñaron con hacer la «machada» y empatar el encuentro con un remate de Pina que se estrelló en el larguero, un disparo que rozó la gloria del gol y que hubiese supuesto el (2-3) y un posterior, asedio español contra el equipo asiático.
Sin embargo, el marcador no se movería, España terminaría como subcampeona del mundo, otra vez ante Japón como en la final sub 17 de hace cuatro años y Japón tocaría la gloria mundial, nuevamente, como hace cuatro años y ante España en la final, una selección japonesa que al igual que España apunta a tocar la gloria mundial, a nivel absoluto, en el próximo mundial de Francia 2019 y por edad generacional, sobre todo, en las próximas citas mundiales de 2023 y 2027.
Dolidos y dolidas por la derrota pero muy orgullosos y orgullosas de enorme campeonato mundial que ha realizado España, felicitamos a una generación, la de Patri Guijarro, Carmen Menayo, Mayte Oroz, Aitana Bonmati o Damaris que tarde o temprano nos llenará de gloria en campeonatos continentales y mundiales. ¡¡GRACIAS SELECCIÓN!!, ¡¡VIVA ESPAÑA!!, ¡¡VIVA EL FÚTBOL FEMENINO!!…