Redacción: web oficial Rafa Nadal
Rod Laver vio como Rafa Nadal se coronaba por segunda vez campeón del US Open, poniendo el broche de oro a una gira en pista dura difícil de olvidar. Nadie ha podido con él. Ni siquiera el número uno mundial, Novak Djokovic, que ahora, con el triunfo de Rafa por 6-2, 3-6, 6-4 y 6-1, ve peligrar ese puesto -sólo le separarán 120 puntos en la clasificación mundial-.
Son trece títulos de Grand Slam, a uno de la marca de Pete Sampras (14), que parecía inalcanzable, y a 4 del récord absoluto de Roger Federer. Un título que le reportará un suculento cheque de 3.6 millones de dólares (unos 2,7 millones de euros), la bolsa más grande en la historia del tenis masculino.
Nadal empezó fortísimo para el deleite de los 23.000 espectadores que llenaron la Arthur Ashe, pero cuando al otro lado de la red está Djokovic uno nunca puede relajarse. Un despiste de concentración le costó a Rafa el segundo set, pero lo mejor estaba por llegar. Intensidad altísima, golpes imposibles de ambos, carreras por toda la pista…
Tenis de altísimo nivel, aunque ya sabemos que Nadal es capaz de dar una marcha más a su juego cuando lo necesita. Era el momento y eso le llevó a ganar un tercer set que sería casi la estocada definitiva. Esta llegaría en el segundo juego del cuarto set. Se colocó 3-0 y, aunque sólo era un ‘break’, fue una losa psicológica para Djokovic.
Ya no veía la forma de desbordar a Nadal y las piernas empezaban a pesar. Y eso lo aprovechó Rafa para sentenciar un título que desde el primer día parecía destinado a llegar a sus manos.