Redacción: Latribunamadridista.com
Con el triunfo de ayer en Eibar en Ipurúa, el Real Madrid además de dejar patente que ha resurgido, los blancos liquidan una mala racha que les perseguía en los partidos domésticos lejos de Chamartín donde hasta el choque de ayer, sólamente habían ganado dos, en concreto, el primero con el que se arrancó el campeonato 2019/20, ante el Celta en Balaídos (1-3) y en Sevilla ante el cuadro hispalense por (0-1), encuentro que se resolvió con gol de Benzema y que dejaba al Real Madrid como líder del torneo de la regularidad.
Sin embargo, empates en Villareal (2-2) y Atlético de Madrid (0-0) y la derrota en Mallorca (1-0) auguraban malos números para un Zidane que recordemos, al llegar a la casa blanca en su primera etapa, en la que ganó tres Champions League consecutiva y una Liga, entre otros títulos, logró recortar hasta 12 puntos al Barcelona, en una Liga, otro más, perdida antes de acabar el año, por culpa de su antecesor en el cargo, Rafa Benítez, un Real Madrid que sumó ocho triunfos lejos del Bernabéu y peleó hasta la última jornada con el Barcelona por ganar la Liga, una temporada que concluyó con enorme alegría para el Real Madrid ganando la Undécima en San Siro, por penaltis al Atlético de Madrid, la primera de las tres imborrables Champions League conquistadas.
Con el triunfo de ayer, se pone fin a una mala racha de resultados que nos perseguían en Liga en lejos de Concha Espina, un triunfo que debe servir de motivación para asaltar el Camp Nou el próximo 18 de Diciembre.
¡¡HALA MADRID Y NADA MÁS!!…