Redacción: Samuel Zamorano/latribunamadridista
El Madrid cierra el mes de septiembre con un tercer empate consecutivo y dejando mal sabor de boca. A pesar de ello, se mantiene primero en liga y segundo del grupo F en Champions, empatado a puntos con el Dortmund. Lo mejor del partido fueron los primeros 13 minutos que se pudo ver un combate de boxeo con golpes directos y rápidos por parte de los «Black&Yellow». El conjunto blanco resguardado en su defensa, lanzaba contraataques mediante un despliegue rapidísimo como se pudo ver en el primer gol. Una jugada perfecta que comienza con pase de Modric que rompe la linea alemana y llega a Benzema, que sigue sin estar y lamentablemente se volvió a tropezar en un mano a mano con el portero. Ronaldo abrió la lata pero sigue por la senda de los pasados partidos, participativo cuando le apetece y demostrando que las pretemporadas hay que hacerlas seas quien seas.
Si algo debe reprocharse a Zidane en el planteamiento de hoy son los cambios. Con los tres de arriba fundidos y desacertados, el primer cambio se trataba de James (Kovacic) que ha jugado unos minutos a un buen rendimiento participando en las acciones ofensivas y presionando levemente por detrás de Karim. No fue hasta el minuto 87, tras el gol de Schüerrle, cuando el técnico madridista cambiaba a Benzema por Alvaro Morata, un poco tarde para que algo cambiara.
Sin duda, el hombre del partido se llama Rafaël Varane. Una de las tareas del equipo era anular al delantero gabonés Aubameyang que esta noche podrá soñar con el central francés perfectamente. En cada carrera se medían dos velocistas del fútbol europeo que terminaba con la victoria de Varane ganando todos los balones, bien en carrera o bien trabajando en su posterior recuperación. No contento con su incuestionable trabajo defensivo, metía el segundo gol de los blancos que les acercaba a la victoria, durante unos minutos. Siendo muy criticado Danilo, esta noche de Champions ha cuajado un partido a un gran nivel en sus tareas defensivas, que ha sabido resolver adecuadamente durante todo el encuentro. Su marca, Ousmane Dembélé, una joven promesa con mucha técnica y rapidez, ha sufrido para poder superar al lateral brasileño.
Por último, este «nuevo» Borussia continua creciendo,gustando e ilusionando contagiado por una plantilla muy joven, algunos con más experiencia que otros, con una gran ambición. No está nada bien compararlo al Dortmund de Klopp pero se asemejan a la ambición característica de jugadores jóvenes de larga proyección como Emre Mor, Ginter, Julian Weigl o el mismo Dembélé.