LA QUINIELA DE CARLO

Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista

No es normal que una pretemporada catapulte de tal forma la revalorización de determinados jugadores como ha sucedido en el Real Madrid. Futbolistas que parecían destinados a ser actores secundarios con la llegada de los nuevos fichajes han aprovechado su oportunidad y ahora mismo cotizan a la alza, tanto que disputan la titularidad.

Con Xabi e Illarra incorporados a la dinámica del equipo, hasta siete posiciones presentan una clara disyuntiva que deberá ir resolviendo Ancelotti partido a partido. Sólo Ramos, Marcelo, Cristiano y Benzema parecen tener asegurado un sitio en el once titular. Para los demás puestos, la quiniela está abierta.

Casillas-Diego López
Una decisión trascendente, la de la portería. Diego López no ha hecho sino ratificar su inmensa calidad en esta pretemporada y el técnico italiano, que lógicamente conocía mejor a Casillas por su trayectoria internacional, ya sabe que tiene dos porteros de absoluta garantía. Quién juegue contra el Betis debería convertirse en titular… e Iker parece contar con una ligera ventaja.

Arbeloa-Carvajal
Hoy por hoy sus posibilidades apuntan a un empate técnico. Carvajal ha aprovechado sus oportunidades. Ha jugado más porque estuvo desde el principio y ha demostrado que está suficientemente preparado para ser titular.

Su carta marcada es su vocación ofensiva y le favorece que tácticamente su entrenador quiera que sean los laterales los que se proyecten en ataque por las bandas. A Arbeloa le avala su oficio y su perfil más defensivo puede y debe ser clave en los partidos apretados.

Pepe-Varane
No es una batalla de presente, pero seguro que se plantea cuando el francés se recupere totalmente de su lesión. Instalado ya en la selección absoluta de Francia, con el aval de su rendimiento en el tramo final de la temporada pasada y con la presencia de su principal valedor, Zidane, en el cuadro técnico… tendrá seguro su oportunidad.

De Pepe, que comenzará como titular la temporada, depende que ese momento llegue antes o después. Si mantiene un nivel alto complicaría la vuelta a escena de Varane.

Xabi Alonso-Illarramendi
Uno de los dos estaba llamado a ser el mediocentro de referencia, el encargado de salir con el balón jugado desde atrás, pero sus lesiones y el notable rendimiento de Casemiro y Modric en esa faceta ha ampliado el abanico de candidatos.

Xabi tiene un plus añadido: su precisión en los desplazamientos en largo, que en momentos determinados son vitales para el desarrollo del juego.

Casemiro-Khedira
El brasileño ha sido la gran revelación de la pretemporada y de jugador de relleno ha pasado a tener su lugar. Teniendo en cuenta que Khedira jugará con Alemania el miércoles y él estará más descansado, no sería extraño, incluso, que fuera titular el domingo ante el Betis. Puede jugar de mediocentro único por delante de la defensa; repartirse el ancho del campo con otro volante central y ser medio diestro en ese triángulo que a veces forma Ancelotti.

Khedira no tiene secretos. Su físico, su capacidad para jugar de área a área y su poder de recuperación son cualidades que no tienen ninguno de los compañeros que le disputan la plaza.

Modric-Özil
Hasta ahora, con Xabi e Illarra fuera de la circulación, los dos han sido fijos y lo lógico es que los dos comiencen la Liga como titulares. Modric ha sabido adaptarse a una labor de canalizador que no lo era extraña y ahora mismo, más retrasado, es el gran organizador del equipo.

Özil está jugando de interior derecho con clara vocación ofensiva y con la obligación de cerrar su banda en el repliegue, cuando el rival tiene el balón. Si Xabi o Illarra entran, en un futuro, Modric y Özil se jugarán entre sí un puesto, lo que no significa que sean incompatibles, todo lo contrario. Es simplemente una cuestión numérica. En el equipo sólo caben once.

Isco-Di María
Por lo visto en la pretemporada el sub 21 parte como titular. Su posición de partida es la de interior izquierdo, con las mismas obligaciones que Özil a la hora defender. Di María deberá esperar su momento y tranquilizar su juego, demasiado acelerado en determinados momentos. Sería el jugador más afectado por la llegada de Bale.