La dureza eslovena y la caldera de Cejde firman la primera derrota de la era Orenga y de España en el eurobasket

La crónica: Latribunamadridista.com.

Lo anunciábamos en la previa, Eslovenia  era el rival más complicado de la primera fase de grupos, con un Cejde Arena que es una caldera a presión, con un baloncesto lento y de mucho contacto físico especialmente en defensa y bajo la canasta, en parte también por los permisivo de los árbitros algo que podía desquiciar y de hecho desquició a España que lapidó ocho puntos de ventaja al inicio del tercer cuarto para caer finalmente por 78-69, nueve puntos de diferencia y la obligación de ganar los tres partidos que restan de la primera fase para pasar como segundo a la siguiente fase y con la mayor cantidad de puntos posibles que se puedan computar, como los de ayer ante Croacia, de la primera fase.

Con un quinteto poco habitual, los dos Sergios madridistas (Llull y Rodríguez) y Calderón y Rudy en el banquillo, con el fin de jugar a Eslovenia con sus misma armas, partido lento y mucho juego interior, el encuentro se convirtió en todo lo contrario, un correcalles del que en principio golpeó primero España ganando al término del primer cuarto (12-19, min. 10) y al descanso (25-33) a pesar del parcial inicial de Eslovenia al inicio del segundo acto que frenó Orenga con la entrada de un enchufadísimo José Manuel Calderón, el mejor de España en el día de hoy (14 puntos), sólo superado por los 17 de un siempre perfecto, Marc Gasol (17 puntos, máximo anotador de la ÑBA en el partido) que con tres triples consecutivos frenó el primer arreón de remontada eslovena.

Sin embargo, en la reanudación Eslovenia apeló a lo que temíamos, jugo duro sorteando el reglamento, permisivos árbitros, caldera del Cejde Arena y además, acierto desde la línea de tres de Nachbar que con 14 puntos comandó la remontada local sumaron 27 puntos en este tercer cuarto que dejaron estériles los 18 puntos, buenos 18 puntos de una España que no frenó su acierto de cara a la canasta rival pero que se vio superada por dos tanteos arrolladores de Eslovenia (27-18) y (26-18), 53 puntos en veinte minutos gracias también al festival anotador de los Dragic especialmente Goran Dragic, 18 puntos, máximo anotador de Eslovenia, una losa demasiado pesada para una España que en los últimos minutos del partido dio sensación de fragilidad defensiva y que tendrá que emplear a fondo en los tres partidos que restan de la primera fase para pasar a la segunda fase como segunda, al menos de su grupo, y con la mayor cantidad de puntos o victorias acumuladas de la primera fase. A la décima fue la vencida y se rompió la racha de imbatibilidad de Orenga como seleccionador español.