Crónica-Redacción:Noelia Pinto Cervero-Benito Villamarín-Latribunamadridista
El Real Madrid goleó al Real Betis (0-5) en su visita al Benito Villamarín en un encuentro que se resolvió en la primera parte gracias a los goles de Cristiano Ronaldo, Bale y Benzema, que sirvieron para que el conjunto de Carlo Ancelloti sumara tres puntos que le colocan como colíder provisional de la Liga junto a Barcelona y Atlético de Madrid.
Mucho han cambiado las cosas desde la primera vez que se vieron las caras Real Madrid y Betis. En aquella jornada inaugural el conjunto sevillano dio muchas razones para pensar que podía hacer una buena campaña. Bien plantado en el campo, con el control de la posesión y con una defensa muy sólida, el conjunto entrenado por Pepe Mel hizo que el conjunto merengue tuviera que sufrir para conseguir el 2-1 final.
Seis meses han pasado desde aquel partido y las sensaciones son totalmente opuestas. El conjunto verdiblanco deja mucho que desear con aquella versión que se vio en los primeros partidos y su permanencia en la máxima competición española para la próxima temporada se complica con el paso de las jornadas, haciendo que el Benito Villamarín sea un auténtico polvorín a punto de explotar.
El Real Madrid pudo campar a sus anchas por el feudo verdiblanco. Los de Ancelloti salieron con gran intensidad, conscientes de que podían meter presión a Barcelona y Atlético de Madrid, y eso se vio durante los 90 minutos. Cristiano Ronaldo, demostró una vez más porque ha sido elegido como ‘Balón de Oro’ y a los diez minutos adelantó a su equipo con un gran disparo ante el que Andersen no pudo hacer nada.
Tras el tanto, el conjunto blanco no bajó el ritmo y se fueron a por el gol de la tranquilidad. Ronaldo lo volvió a intentar, pero tuvo que ser Gareth Bale, de falta, el que aumentara las distancias en el marcador. Con el 0-2, el conjunto de Garrido se quedó noqueado, vagando por el campo incapaz de crear peligro a la portería de Diego López, a la que sólo se acercaron en el minuto 40, gracias a Leo Baptistao.
Cuando todo parecía indicar que el 0-2 sería el marcador con el que se llegaría al descanso, apareció Benzema, que aprovechó una gran jugada de Luka Modric para subir el tercer tanto. A la vuelta de los vestuarios el partido no cambió ni un ápice. El equipo madrileño no bajó el nivel, y tras varias ocasiones en las que Ronaldo y Benzema se encontraron con las manos de Andersen, Di María metió el cuarto tras un córner.
Con el partido resuelto, Ancelloti dio la oportunidad a los menos habituales. Illarramendi salió por un Di María que recibió los elogios de su entrenador desde la banda, mientras que Nacho y Morata volvieron a tener una nueva oportunidad de demostrar su potencial. Ya en el minuto 90, el Madrid cerró la ‘manita’ gracias a Morata, que aprovechó el desconcierto de la defensa verdiblanca y que incendió las gradas de un Benito Villamarín al que se le empieza a acabar la paciencia.