Redacción:Noelia Pinto Cervero-LaTribunaMadridista
Parece que va camino de convertirse en una costumbre. Ante el Basilea Isco volvió a ser el futbolista del Real Madrid que más balones recuperó. El mediapunta malagueño, al igual que sucedió en Eibar, lideró la estadística del partido en este apartado al sumar nueve recuperaciones. Además, recorrió más de 10.000 metros (concretamente 10,2 Km). No es un dato menor. Avala el nuevo talante defensivo de Isco y la decisión de Ancelotti de reubicarle en la medular tras la lesión de Modric.
“Ha demostrado que puede jugar en esa posición”, aseveró el técnico italiano tras el duelo ante el Eibar. Los números ratificaron su afirmación. Isco recuperó 12 balones, cinco más que Kroos, su compañero en el centro del campo. Fue también el que más pases buenos dio (72 de 77, un 93,5 por ciento).
Si comparamos las cifras de esta temporada con las de su primer año de blanco, advertimos la sensible mejora de Isco en el aspecto defensivo. El pasado curso promedió tres recuperaciones por partido (174 en 53 encuentros), mientras que ahora su media asciende hasta los cinco robos por choque (85 en 18). Con todo, el internacional español no ha visto aminorada su producción y acierto en el pase y su capacidad de desborde. Esta campaña atesora un 89 por ciento de éxito en el pase por el 88 por ciento del año anterior. Además, completa un regate más por partido. La única merma visible en su juego se establece en la cuantía de disparos que ejecuta. Solo ha realizado seis remates en lo que llevamos de curso (uno cada tres partidos) por los 39 que firmó la temporada anterior (cerca dos por partido).
Isco controla todos los registros del juego. Una referencia más. Ante el Basilea se asoció 12 veces con Kroos y diez con Varane y Cristiano, una demostración de su dominio del espacio. “Ya le he dicho al míster que quiero jugar donde sea y me estoy encontrando bien”, aseguró Isco en la zona mixta de St. Jakob Park. Los fríos números corroboran sus palabras.