Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista
La Semana Santa de Casillas va desde la final de Copa hasta el partido ante el Bayern. Tras conquistar el primer título de la temporada ante el Barcelona, Iker volverá a estar bajo palos mañana en su otra competición: la Champions.
De Clásico a Clásico. Tras el Barça, el Bayern. Un par de miuras seguidos para un Iker que no juega dos partidos consecutivos en el Real Madrid desde principios de diciembre, cuando encadenó el Xátiva en Copa y el Copenhague en Champions.
Tras finiquitar la Copa levantando el trofeo en Mestalla, el objetivo de Iker ahora es apurar al máximo la Champions. Le quedan tres partidos por delante y no quiere perdonar ni uno. Para eso necesita llegar a la final de Lisboa del próximo 24 de mayo. Jugó los nueve partidos de Copa y va camino de completar los 13 de la Champions. Mejor imposible para un Iker que corría el riesgo de quedarse sin partidos a principios de año.
Gran rivalidad
Un viejo conocido de Casillas será el último obstáculo para que el capitán blanco consiga llegar hasta el final en las dos competiciones que le entregó Ancelotti a principio de temporada. Iker lleva toda su carrera europea rivalizando con el Bayern. Desde el 2000, el meta ha sido testigo de los grandes duelos de los dos gigantes continentales. Con esta eliminatoria que se avecina, Iker y el Bayern habrán protagonizado 14 enfrentamientos en 14 años. Toda una historia de alegrías y tristezas para el meta.
El primer duelo de Iker con el Bayern fue en su temporada de debut con el Real Madrid, en la 99-00. En aquella edición de la máxima competición continental los blancos se enfrentaron a los alemanes en cuatro ocasiones. En la fase de grupos el Bayern pasó por encima del Madrid con dos goleadas (2-4 y 4-1). Luego volvieron a verse las caras en semifinales y pasó el Madrid (2-0 en el Bernabéu y 2-1 en Múnich).
Fue el comienzo de una avalancha de enfrentamientos Madrid-Bayern. En la 00-01 pasó el Bayern en semifinales y en la 01-02 se clasificaron los blancos en cuartos, aunque esta eliminatoria la jugó César y no Casillas. Iker recuperaría su sitio en la portería dos temporadas más tarde con Queiroz en el banquillo. Madrid y Bayern se ven las caras en octavos y pasan los blancos tras empatar en Múnich y ganar en el Bernabéu 1-0 con gol de Zidane.Las dos siguientes eliminatorias se han saldado con derrota del Madrid ante los alemanes.