GOLEADA PARA NO PERDER LA ESTELA DE LA LIGA

Crónica-Redacción:Noelia Pinto Cervero-Estadio Santiago Bernabéu-Latribunamadridista

El Real Madrid no dejó que Atlético de Madrid y Barcelona se le escaparan más en la clasificación y sigue inmerso en la pelea por el título tras vencer en el Bernabéu al Rayo Vallecano.

Antes, por la tarde, el Barça le había ganado 0-1 al Espanyol con gol de Leo Messi, mientras que el Atlético había remontado en San Mamés al Athletic Club con goles de Diego Costa y de Koke.

No fue un partido brillante en una noche lluviosa y sin mucho ambiente en el Santiago Bernabéu, pero los goles y el poco sufrimiento bastaron a la afición para irse contenta a casa.

El Madrid dominó el encuentro en los 90 minutos y el Rayo, inofensivo, a penas pudo crear juego de ataque. Tras una ocasión de Benzema nada más empezar que no pudo convertir llegó el gol de Cristiano en el minuto 15 después de una gran internada por el carril central que solventó con un balón cruzado ante Rubén.

El monólogo blanco siguió y las ocasiones se sucedieron. Benzema no consiguió romper su mala racha de cara a gol en los últimos encuentros, y volvió a tener otra clara ocasión que no acertó a marcar.

Pese al resultado, y con dos fallos de cara al gol, la afición del Bernabéu mostró su descontento con el juego ramplón del equipo en la primera mitad y se oyeron algunos silbidos. Así se llegó al descanso.

Y a los pocos minutos de la reanudación, en el 55, Carvajal aumentaba la distancia en el marcado y contentaba así a la afición madridista poniendo el 2-0 en el luminoso.

Desde aquí, el Rayo se deshizo por completo y el engranaje ofensivo del combinado blanco (presionado por su afición) volvió a funcionar a la perfección. Aunque es cierto que justo después de este gol, el conjunto de Vallecas tuvo la ocasión de recortar distancias con un disparo de Saúl que se estrelló en el palo de Diego López.

Gareth Bale sería el encargado de hacer los dos siguientes goles. El primero en el 68′ y el segundo en el 70′ dejarían totalmente sentenciado el partido y derrumbado al Rayo.

Y con el partido ya sin más historia, el hambre madridista no era saciado, con lo que en una de las múltiples acciones de ataque, Morata haría el quinta para los merengues.

A la postre todo queda como estaba por la zona de arriba, en la lucha por el título, salvo que queda una jornada menos.