Redacción: Sandra F. Gere.- ESPECIAL FINAL FOUR/ Más emoción no podía faltar para una final de Copa de Europa. Contiene todos los ingredientes: dos equipos muy ajustados, luchadores innatos y un resultado que no sabe hacia dónde decantar la balanza.
El Madrid parece un poco descentrado y el Olympiakos lo aprovecha para seguir marcando tantos sin piedad y adelantarse en el marcador. Ante esta situación, al técnico madridista, no le ha quedado más remedio que pedir un tiempo para motivar a sus jugadores.
Situación complicada
Pero la situación se complica cada vez más y parece que a los blancos se les va de las manos. Los griegos van aumentando su ventaja a base de canastas, lanzamientos libres, faltas no pitadas… y lo que va en aumento en el Real Madrid es la sensación de frustración y ansiedad.
La hinchada del Olympiakos ya lleva largo rato celebrándolo y las caras de los madridistas, que ya dan por perdido el partido.
Y efectivamente, los griegos vuelven a revalidar su título por segundo año consecutivo y es de nuevo campeón de Europa, por lo que el Real Madrid tendrá que esperar un año más para intentarlo. El resultado final ha sido 100-88. Los blancos han luchado pero se han encontrado a unos rivales muy duros.
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