Redacción: Latrribunamadridista.com.
Preparándonos para el efecto 2000 del año siguiente, con el buen sabor de boca de ser campeones intercontinentales con el » aguanis» de Raúl en la final de diciembre del 2008 en Tokio ante el Vasco de Gama (2-1), con Alejandro Sanz como cantante estelar del pop español, con la serie » compañeros» y el personaje de Kimi ( Antonio Hortelano) como fans de las quinceañeras como ocurre ahora con la nueve serie » El Príncipe» e inmersos en la peseta, así llegamos a un mes de junio de 1999 donde el Barcelona de Van Gaal ganaba su segundo liga consecutiva y donde Raúl finalmente se haría con el pichichi liguero, un Real Madrid que llegó al Calderón en plena transición de los Suker-Mijatovic o Seedorf y la posterior llegada de los Morientes, Mc Manaman, Anelka, Casillas, Michel Salgado y compañía que unidos a los Raúl, Redondo, Hierro y Roberto Carlos darían al conjunto merengue, al año siguiente, su octava Copa de Europa en París ante el Valencia (3-0), un equipo que en transición doblegó por última vez en estos últimos quince años, la rodilla en el manzanares por (3-1) ante un Atlético de Madrid que si bien ese año, in extremis, se salvó del descenso al año siguiente se quemaría en las llamas de la zona roja y estaría dos años abrasándose en el infierno de segunda división.
Desde entonces, 15 años, 12 visitas en liga al Calderón, 14 contando la Copa, 9 triunfos ligueros, 2 coperos y 3 empates ligueros es el resultado del Real Madrid en casa del eterno rival de la ciudad, un Vicente Calderón que es sin lugar a dudas, a pesar de su hostilidad y su odio hacia el mejor equipo del mundo, un campo talismán para los blancos. HALA MADRID…