Redacción: Latribunamadridista.com.
A diferencia del Atlético de Madrid, el Real Madrid no ha tenido un camino sencillo para plantarse en la final de Copa teniendo que lidiar con duros rivales como el Valencia y el Barcelona en cuartos de final y semifinales respectivamente.
En primera ronda, ambos se dishicieron de Alcoyano y Real Jaén con mucha facilidad. Los blancos apabullaron a los valencianos por un contundente 7-1 mientras que los colchoneros pasaron la eliminatoria con un 4-0 global.
En octavos de final, el Madrid superó su primer escollo complicado, ante el Celta. En la ida disputada en Balaídos, Cristiano Ronaldo salvó los muebles y maquilló la derrota por 2-1, gol que sirvió para sentenciar en la vuelta por 4-0. El Atlético le endosó un 3-0 al Getafe en la ida y selló el pase a cuartos.
Unos cuartos de final en los que el equipo de Mourinho fue ‘sobrio’ y eficaz para eliminar al Valencia. 2-0 en el Bernabéu y 1-1 en Mestalla para enfrentarse al Barcelona en semifinales. Por su parte, el Betis no pudo remontar el 2-0 adverso del Calderón en el Benito Villamarín.
Y llegaron las semifinales; los de Mourinho aniquilaron al Barcelona es un espectacular encuentro en el Camp Nou: 1-3 y pase conseguido para la final. El Atlético de Madrid no tuvo rival en el Sevilla al que eliminó con más facilidad de la esperada por un global de 3-1. La final madrileña está servida.