Redacción:Noelia Pinto Cervero-LaTribunaMadridista
El Real Madrid paseó la Novena por la capital española. Tras una noche que se alargó hasta altas horas de la madrugada, los jugadores llegaron a Sol para ofrecer el título a los aficionados que se congregaron en el kilómetro 0. A eso de las 12:15, Felipe Reyes, el capitán madridista, llegaba con la copa bajo el brazo, un título que el Madrid llevaba veinte años esperando, desde la Euroliga de 1995, la de Sabonis y Arlauckas. Aplausos y el We are the Champions de Queen para recibir a los campeones en la Comunidad, donde Ignacio González, presidente de la CAM, recibió una réplica del título que el domingo alzó Felipe Reyes. “Como siempre me toca a mí, la próxima vez que vengamos, que espero que sea pronto, que hable Laso, que lo hace muy bien. Este era un objetivo que teníamos desde hace mucho tiempo. Los dos últimos años nos quedamos a las puertas, pero hemos vuelto a poner al Madrid en su sitio”, dijo Felipe Reyes, que también habló de los aficionados. “Ellos son los que nos dan fuerzas cada día para seguir y poner al Madrid en lo más alto de Europa. Este título se lo dedicamos a ellos. Es un sueño hecho realidad, más aún porque lo hemos conseguido en casa. No puedo pedir más”.
“La Novena, se dice pronto”, comentaba Ignacio González, presidente de la CAM. “Esta copa engrandece la leyenda del Real Madrid. Una Copa de Europa que se resistía, que estuvo a punto de caer en Londres hace dos años y el año pasado en Milán. Nosotros teníamos mucha fe en este Madrid y por eso decidimos organizar la Final Four. Creíamos y estamos muy orgullosos de vosotros”.
Otra celebración más, Marcus Slaughter fue el maestro de ceremonias. Los jugadores salieron al balcón de la Real Casa de Correos, donde más de mil aficionados les esperaban al grito de «Campeones, campeones». «Hala Madrid», gritó Reyes que le pasó el testigo al MVP de la final, Chapu Nocioni. «Muchas gracias por estar acá. La verdad es que es un placer para nosotros. El MVP fue el equipo entero», dijo el argentino. Y Slaughter cogió el micrófono y bailó y cantó al ritmo de la canción de Queen.
“Estoy muy contento. El equipo ha hecho un gran trabajo, pero no sólo este año, también los anteriores. Hemos tenido la recompensa. Los dos primeros años se nos escapó por poco, pero este fin de semana todos sumamos y lo conseguimos”, comentaba el otro capitán del equipo, Sergio Llull. “El baloncesto nos debía algo así. Jugar en casa conllevaba presión, pero la afición nos ha llevado en volandas. Llevo tres años aquí y me siento como en casa”, añadía Rudy Fernández.
Después visita al Ayuntamiento. «Os merecéis más que nadie esta Copa. La Novena ya está aquí. Enhorabuena por este triunfo que esperemos que no sea el último. Os deseamos lo mejor en los playoffs y, por supuesto, enhorabuena, campeones», cerraba su discurso la alcaldesa, Ana Botella. «Es la segunda vez en tres meses que venimos. Esta visita la llevábamos esperando muchos años. Los dos últimos nos quedamos con ganas de venir. Estamos muy agradecidos a la afición madridista por el apoyo durante toda la temporada», señaló el capitán Reyes.
El próximo reto de este Madrid es la Liga Endesa. El miércoles se mide al Laboral Kutxa, posible rival en los cuartos de final en los playoffs. El objetivo ahora es el triplete, algo que el Real Madrid no consigue desde hace más de 40 años. Rudy cree en ello: “Debemos saborear este título, pero nos queda otra competición por ganar. Esperemos que éste sea un año perfecto”.