Redacción:Noelia Pinto Cervero-LaTribunaMadridista
La situación de Sergio Ramos en el Real Madrid promete colear hasta al menos final de temporada, que es cuando está previsto que el club blanco se reúna con el entorno del jugador para intentar encontrar una solución para su renovación ‘vitalicia’. Y es que mientras este momento llega no van a dejar de surgir rumores que coloquen al sevillano en el punto de mira de otros clubes.
El último de ellos proviene del medio ‘Vox Pópuli’, el cual indica que el Bayern de Múnich de Pep Guardiola está empezando a usar con Ramos la misma táctica que empleó el pasado verano con Xabi Alonso. Esta no es otra que acercarse al futbolista y a su entorno para proponerle un cambio de aires con destino a Múnich. En el caso del tolosarra el plan funcionó por el carácter nómada e inquiero del futbolista, además de por estar cerca de cumplir 33 años. Sin embargo, en el caso de Sergio Ramos las condiciones no son las mismas ni parece tan sencillo que el andaluz esté por la labor de aceptar la propuesta del entrenador catalán.
Evidentemente Ramos quiere aumentar su estatus actual en la plantilla y sentirse algo más valorado de lo que ya está. De ahí que en estos momentos haya algunas pequeñas diferencias entre las dos partes. Pero nada que no se pueda arreglar dentro de unos meses cuando tanto el agente del jugador, René Ramos, como el Real Madrid se sienten a negociar. Al sevillano le encantaría poder tener un caché similar a otros grandes centrales del mundo como Thiago Silva, David Luiz o Lahm, quienes superan fichas de 10 millones de euros netos. La cuestión es que por ahora el club blanco no llega más allá de los 8 ‘kilos’ y la presencia de otras ofertas de clubes potentes podría agitar un poco más la situación.
En consecuencia, lo más probable es que las dos partes tengan que acabar cediendo un poco. Es lo que suele ocurrir cuando ambos quieren y desean un acuerdo. El sueño de Sergio Ramos es retirarse en el Real Madrid y el de Florentino Pérez que el sevillano lo haga. Así que habrá acuerdo, pero a su debido tiempo. Hoy por hoy nadie se imagina al andaluz vistiendo otro color que no sea el blanco.