Redacción: Rubén López / Latribunamadridista.com
Imagen: Diario AS
El Real Madrid ha vencido por la mínima a un Athletic de Bilbao muy competitivo que en los últimos compases del encuentro estuvo muy cerca de conseguir el empate. La última jornada será la encargada de decidir quién se alzará con el título liguero, Real Madrid o Atlético de Madrid. El único tanto del choque fue obra de Nacho.
El técnico madridista, Zinedine Zidane, apostó por la misma fórmula exitosa que la semana pasada ante el Granada con la única novedad obligada por lesión de Marvin entrando en su lugar Odriozola. El once madridista fue el compuesto por: Courtois; Odriozola, Nacho, Militao, Miguel; Casemiro, Valverde, Modric; Vinícius, Benzema y Rodrygo.
El entrenador rojiblanco, Marcelino, alineó un once muy previsible con la inclusión de Yeray, que llegaba entre algodones, en el eje de la zaga junto a Íñigo Martínez. La alineación vasca fue la formada por: Unai Simón; Balenziaga, Yeray, Íñigo, De Marcos; Unai Vencedor, Dani García; Berenguer, Sancet, Morcillo y Williams.
El encuentro comenzó muy equilibrado con dos equipos muy intensos. Al Real Madrid le costó hacerse con el mando del partido, pero con el paso de los minutos se fue haciendo poco a poco con el control del choque. No obstante, el Athletic llegaba con cierta sensación de peligro en sus acercamientos, aunque Courtois no tuvo que intervenir con las manos.
El Real Madrid consciente de la trascendencia del choque intentó abrir la lata, pero se encontró con un Athletic de Bilbao muy bien armado, impidiendo que el equipo de Zidane durante los primeros 45 minutos encontrara algún resquicio en la zaga rojiblanca.
Los dos extremos del equipo madridista tanto Vinícius como Rodrygo no estaban aportando creatividad ni desequilibrio en banda y no conseguían ser resolutivos de tres cuartos de campo hacia adelante.
En una de las pocas aproximaciones del cuadro merengue con Odriozola ganando línea de fondo, llegó la jugada polémica del encuentro. El centro del lateral madridista tocó en la mano de Morcillo, siendo muy clara porque el brazo del jugador vasco estaba totalmente despegado del cuerpo, por lo que ocupa un mayor espacio debiendo decretarse el punto de penalti. El colegiado del encuentro, Mateu Lahoz, no lo vio en primera instancia, pero en la sala VOR comandada en el día de hoy por Iglesias Villanueva tampoco vio nada punible.
En el tramo final de los primeros 45 minutos el Athletic gozó de la mejor ocasión del encuentro a balón parado. Un libre directo ejecutado por Berenguer se marchó por muy poco de la meta defendida por Courtois. Con el empate sin goles se llegó al intermedio.
La segunda parte comenzó con una gran ocasión del Real Madrid a la salida de un saque de esquina botado por Modric, rematado por Militao con un gran cabezazo que se marchó desviado. En el 49 llegó la primera aproximación del equipo local en los segundos 45 minutos. Un gran contraataque iniciado por Sancet con una gran cabalgada logró, el jugador vasco asistió a Morcillo que finalizó la jugada con un latigazo, pero Courtois desbarató la ocasión con una buena parada.
La segunda mitad tenía un ritmo mucho más intenso y dinámico. No tenía nada que ver con la primera parte. Las ocasiones se sucedían por parte de ambos bandos. El equipo de Zidane conseguía hacer mucho daño al Bilbao en acciones a balón parado, mientras que sufría mucho en las transiciones rápidas del equipo de Marcelino, ya que el cuadro merengue estaba muy desarbolado y no encontraba ni la solidez ni la forma de contrarrestarlos.
En el minuto 56 Modric tuvo una gran ocasión para abrir la lata. El croata probó fortuna con un disparo raso desde larga distancia muy ajustado, obligando a Unai Simón a realizar una gran intervención para mandar el balón a córner. En el 60 el equipo de Zidane tendría una nueva oportunidad en la cabeza de Casemiro a la salida de un córner, pero el testarazo del carioca se topó con el larguero.
El Madrid rondaba el gol pero la fortuna no estaba de su lado. Finalmente, a la cuarta fue la vencida. Otra vez tras un nuevo saque de esquina llegaría el ansiado tanto del equipo de Zidane. El córner sacado en corto fue a parar al segundo palo, donde Rodrygo bajó el balón para habilitar a Casemiro poniendo un gran centro raso al segundo palo, donde apareció Nacho actuando de nueve que en boca de gol no perdonó para poner el 0-1 en el luminoso.
En el otro partido del que estaba pendiente el Real Madrid, el cuadro de Simeone estaba perdiendo 0-1 ante el Osasuna. Todo estaba de cara para el equipo de Zidane que con esos resultados momentáneos era líder de la Liga Santander. El Real Madrid debía aguantar el resultado y esperar buenas noticias del choque del Wanda.
El gol de Nacho supuso que el Bilbao se fuera al ataque con todo en busca del empate y estuvo a punto de conseguirlo. En el 74 llegó el primer aviso del equipo local tras un centro de Ibai con dirección Asier Villalibre, que finalizó la jugada con un remate que se fue muy arriba de la meta de Courtois.
El Real Madrid sufría las acometidas del equipo vasco que no se rendía y achicaba todos los balones que colgaba el cuadro de Marcelino. En el 82 el Athletic de Bilbao gozó de la mejor ocasión para lograr el empate. Un magnífico centro frontal de Unai López fue rematado por Mikel Vesga con un gran cabezazo que se fue lamiendo el poste de la meta defendida por Courtois.
Finalmente, el equipo de Zidane consiguió aguantar el resultado de 0-1 para llegar con vida a la última jornada liguera. No obstante, llegaban malas noticias desde el Wanda ya que los tantos de Lodi y Suárez dieron la vuelta al tanto inicial de Budimir, por lo que el equipo de Simeone se mantiene líder y depende de sí mismo para ser campeón de Liga en la última jornada frente al Valladolid en el Estadio José Zorrilla.