Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista
El luso prometió a los fisios regalarles un coche si ganaba el Balón de Oro o el Madrid la Décima
Cuando el pasado lunes, Edson Arantes do Nascimento, Pelé, pronunció el nombre de Cristiano Ronaldo en Zúrich, la alegría se apoderó de todos los rincones de la Ciudad Deportiva de Valbebebas. Pero especialmente hubo un departamento donde esta elección se celebró de una forma desbordada. Se trata del área de fisioterapeutas del primer equipo encabezados por el gran Pedro Chueca, junto a otros veteranos como Dani Pirri, Javier Santamaría o Juan Muro. Todos ellos sienten una especial predilección por el jugador portugués.
Cristiano Ronaldo se ha ido ganando el cariño con el paso de los años, con los múltiples gestos personales y altruistas que ha tenido con todos ellos. Y siempre sin esperar nada a cambio. Es la forma que tiene el nuevo Balón de Oro de expresar y agradecer el cariño, entrega, esfuerzo y dedicación que todos ellos manifiestan diariamente con el 7 blanco.
Cristiano no podría mantener ese nivel competitivo tan elevado sin ese trabajo diario y esos cuidados, mimos, tratamientos e innumerables horas dedicadas a cuidar su cuerpo.
Un pedacito del Balón de Oro es de los fisios
Dicho de otro modo, un pedacito delBalón de Oroque recibió el pasado lunes también es de los fisios y por eso ha dejado caer en varias ocasiones a todos los fisioterapeutas que les obsequiaría con un coche si era elegido Balón de Oro o el Real Madrid lograba la anhelada Décima Copa de Europa.
La promesa se produjo en algún momento durante las largas horas que el portugués pasa encima de la camilla. Y no es precisamente Cristiano Ronaldo una persona dado a hacer promesas por hacer. Es hombre de palabra.
Porque de cumplir la promesa, no será el primer regalo ni el último. De un tiempo a esta parte son numerosos los detalles que ha ido teniendo con todos ellos. Desde un móvil de última generación, pasando por un extraordinario reloj y un Ipad. Sin duda una muestra más del lado humano de Cristiano Ronaldo. Algo habitual cada día en la Ciudad Deportiva de Valdebebas y que ahora ha llegado a todos los rincones del globo terráqueo con las lágrimas inesperadas del portugués.