Redacción: LaTribunaMadridista.com
La liga pasada, la I del Covid y la de las remontadas madridistas con 10 triunfos y 1 empate en los 11 últimos encuentros ligueros, todos ellos tras el confinamiento y todos ellos, sin público, la Liga del ZidaneTeam 2019/20, la segunda de Zizou como técnico madridista y el segundo de los dos títulos que en 2020 ha logrado Zinedine desde su regreso a la nave madridista en marzo de 2019, el gran objetivo además de sumar los 6 triunfos en el Di Stéfano se basó en dejar la portería a cero en gran parte de los encuentros algo vital para un equipo al que le cuesta mucho marcar, de ahí que no encajar era sinónimo en más de un 85% de los partidos de triunfo merengue.
Sin embargo, esta temporada, el Real Madrid que ha aumentado su capacidad goleadora, 15 goles anotados, está también encajado demasiados tantos en contra, 10 goles ha recibido Courtois y en el caso de la competición doméstica hay que remontarse al primer partido liguero en casa de esta temporada para ver el muro madridista a cero, un encuentro donde el Real Madrid venció al Valladolid por (1-0, gol de Vinicius).
Desde entonces, hasta en cinco partidos consecutivos, Thibo ha recibido al menos un tanto y curiosamente, en dos de esos cincos partidos ligueros, el Real Madrid ha terminando hincando la rodilla, en concreto, en la primera y única derrota liguera en Valdebebas (0-1 ante el Cádiz) mientras que la segunda derrota llegó en Mestalla (4-1 ante el Valencia en aquel encuentro alocado donde el Real Madrid recibió un nefasto arbitraje con 3 penaltis en contra algo que nunca le había ocurrido anteriormente en la historia de la Liga).
A pesar de los triunfos, en concreto, el (1-3) en el Camp Nou o el (4-1) ante el Huesca, el Real Madrid encajó dos goles en dichos encuentros y en el último partido liguero, el pasado sábado en Villareal, los blancos empataron a 1 en un encuentro donde comenzaron ganando pero que finalmente, el submarino amarillo logró igualar.
Por ello, el gran objetivo para Courtois, esta noche en el Di Stéfano es no encajar goles y sumar tres puntos más y sobre todo, no desengancharse por la Liga, un obligado triunfo para cerrar noviembre en casa ante el Alavés.