Chicharito: «En el Madrid no fue todo de color de rosa»

REDACCIÓN: Dori Ayllón

Chicharito que ahora juega en el Bayer Leverkusen, ha vuelto a España para enfrentarse al Barcelona en la fase de grupos de la Champions. El delantero ha hablado para MARCA, haciendo repaso a su etapa madridista, que según cuenta el mexicano no fue fácil.

Sus cambios de club durante los dos últimos años

«En la vida todo el mundo busca estabilidad, pero también la vida es renovarse o morir. Estoy muy contento con los cambios. La vida son cambios. Que me incomode o no, ya no me interesa. Ya sucedieron. Ahora adaptarme y darlo todo como en todos los sitios que he estado y también en la selección».

No se queda con ninguna liga en particular
«Es comparar otra vez. Igual. Es para que diga si la Liga tiene esto, pero la Premier, no. Son, culturas, países, idiomas distintos. Diferentes formas de manejar los Campeonatos. Es obvio. Las cuatro Ligas que he jugado, no me olvido de la mexicana, son grandes. Siento que ésta tiene un gran nivel. Y valoro mucho el interés que este gran club tuvo en mí y estoy aquí para disfrutarlo».

No compara al Madrid y al Barça
«Todos los equipos de la Champions son igual de complicados de ganar… No soy entrenador, soy jugador. Son estilos diferentes pero el grado de dificultad es el mismo. Ahorita no pienso en el Madrid. No puedo compararlo. Me preocupan el Barça, la Roma y el Bate, que están en mi grupo».

Su gol ante el Atlético en Champions, inolvidable
«Ese partido no lo olvidaré nunca. Un partido muy bonito para todos los madridistas en general y para mí en especial».

Cómo han sido estos últimos años
«Todos los años son difíciles y el presente también. Y también los más bonitos porque aprendo muchísimo de lo bueno y de lo malo».

Sus quejas por la falta de oportunidades en el Madrid
«Lo dije en ese momento porque no me habían preguntado antes cómo me sentía por no jugar. Ese periodista de Fox preguntó y yo contesté. Si digo que sin jugar iba a estar contento, me tendría que retirar de esta profesión. Coincidió, pero regresé al Madrid y tampoco jugué. Esas declaraciones no creo que tuvieran incidencia en que empezara a jugar. Jugué cuando, lamentablemente, se lastimaron dos jugadores».

Esperar la lesión de un compañero para jugar
«Sí es duro, pero en mi cabeza nunca ha estado que se tiene que lesionar alguien para que yo juegue. Lo malo es no jugar. En nuestra profesión siempre hay una espera. Y la espera es lo más difícil. En una profesión cuando trabajas sabes si lo haces bien o mal, pero si no juegas no sabes si lo haces bien o mal. Te entrenas, estás con el equipo, pero no haces nada. No participas, no eres parte importante. Eso es difícil»

Sigue en contacto con algunos madridistas
«Sí claro, con Keylor, Luka, Sergio… Nos llamamos. Todavía no he tenido tiempo de ir a Madrid con tanto viaje».

La noche del 31 de agosto
«Lo pasé mal por Keylor y por David, que es amigo de tres años en el Manchester. Lo pasé mal por los dos. Estoy al tanto de lo que Keylor ha dicho pero no estoy en posición de meterme a hablar para que luego saquen cosas de lo que yo dije que así se sintió Keylor. Keylor habla de cómo se sintió. A mí, como amigo, ellos me han hecho saber cómo fue. Es una situación difícil indistintamente de que el final fuera feliz para los dos y estén ambos muy contentos».

Sobre si le dio tiempo a comprender la magnitud del Real Madrid
«Pues no lo sé. Lo que viví y sentí no sé si es la mayor magnitud o la magnitud exacta. A lo mejor se lo pueden responder las leyendas que se han quedado o las leyendas que pasaron por allí. En cuanto a mí se refiere creo que en una semana te das cuenta de la magnitud del club en el mundo y todo lo que conlleva representar esa institución. Yo lo disfruté al máximo y aprendí muchísimo de mis primeros seis meses, en los que hubo cosas malas y también los seis siguientes, en los que hubo cosas mejores. No fue siempre de color de rosa».

Nunca mira para atrás
«Ni para agarrar impulso. Ese impulso es saber bien lo que has logrado y recorrido y lo que no hemos hecho bien también. Yo no me arrepiento de nada de lo que he hecho. El arrepentimiento no existe en mi vida. Existe el aprendizaje. Para mi persona todos los años han sido diferentes, pero han sido los mejores en cada momento. No me gusta amargarme la vida con recuerdos que no puedo arreglar. Lo malo que viví es bueno porque me dio fortaleza y aprendizaje para cuando llegara lo bueno y saber aprovecharlo. Lo malo es bueno. Así es mi forma de ver la vida».