Redacción: Luis Alberto Reyes-La Tribuna Madridista
Iker Casillas se ha despedido esta mañana en la sala de prensa del Santiago Bernabéu. Tras anunciarse su marcha de manera oficial en la noche del sábado, el capitán comparecía ante los medios para decir adiós al madridismo.
El mostoleño leyó un comunicado, ya que no admitió preguntas, seguramente para evitar cuestiones incomodas en torno a todo lo que ha rodeado su salida. Iker estuvo sólo, sin presencia institucional ni de ninguno de todos los títulos que ha logrado en estos años, lo que índica la tensa relación que había entre ambos.
Tardó en arrancar Casillas, fruto de la emoción.»Hoy vengo a este gran estadio para despedirme de todos y en especial de los madridistas» empezó, aunque las primeras lineas de su comunicado eran para su nuevo club: «Me voy al Oporto por la ilusión que me han transmitido y por sus muestras de apoyo. Muchas gracias al Oporto, lucharé por ganar títulos allí» señaló.
«Es difícil decir adiós al mejor club del mundo tras 25 años. Este club me lo ha dado todo», señaló el guardameta. Hizo un pequeño balance de estos 25 años en el club «Hemos reído, llorado y disfrutado juntos. Este club me ha formado como deportista y como persona».
También tuvo unas palabras para sus amistades dentro de la entidad: «Dejo grandes amigos aquí. Siempre podrán contar conmigo. Y sé que yo con ellos» «Gracias a todos mis entrenadores y sus cuerpos técnicos, de todos he aprendido mucho», reconoció el capitán merengue
«Gracias a todos los que trabajan en el club y que no se les ve. Siempre me han ayudado». Además Casillas agradeció a todos los madridistas su «apoyo incondicional desde que llegué al primer equipo con 18 años».
Iker también utilizó una de sus frases más repetidas en sus entrevistas en estos años. «Por encima de ser buen o mal portero, quiero que me recuerden como una buena persona. Con mis defectos». Para finalizar, afirmó que siempre seguirá siendo del Madrid: «Allá donde vaya, siempre gritaré ¡Hala Madrid!» «Esto no es un adiós. Es un punto y seguido, un ‘hasta luego», concluyó.