Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista
La Federación Española (RFEF) envió a Julio César Avellaneda, secretario general de la Confederación Brasileña (CBF), la renuncia de Diego Costa a jugar con Brasil y su firme voluntad de hacerlo con España«tanto en partidos amistosos como oficiales», según reza en el documento firmado hoy por el pichichi de la Liga ante el notario Carlos Alcocer Torra.
La respuesta de la CBF ha sido inmediata: desconvoca al jugador para los amistosos que Brasil iba a disputar en noviembre en Estados Unidos y Canadá, aunque advierte que recurrirá ante la FIFA para evitar que el pichichi de la Liga pueda jugar con España. Carlos Alberto Parreira, coordinador de la Canarinha, lo confirmó en ‘O Globo’: «Yo no lo traería más. La CBF no puede ser acusada de omisión, pero una vez que el jugador se decidió por España, el proceso se agotó». Después, Scolari informó al presidente de la CBF de su intención de seguir el consejo de Parreira y borrar a Diego Costa de la lista de Brasil que hará pública el jueves.
La CBF, que sabía de la decisión por el comunicado oficial de sefutbol.com anticipado por este periódico, estudiará a partir de ahora los pasos a seguir. Su presidente, José María Marín, hijo de españoles, ya anticipó que recurrirán a la FIFA para evitar la convocatoria de Diego Costa por España. «El Caso Costa no está cerrado. Recurriremos ante los jueces deportivos porque no podemos permitir que se abra esta puerta. Tengo buena relación con Villar, pero le avisé que no estábamos de acuerdo con el interés de España en llamar a Costa».
La legalidad vigente está de parte del futbolista hispano-brasileño, tal y como especifica el punto 3 del artículo 8 de los estatutos de la FIFA. La CBF argumentará que el pasado viernes convocó oficialmente a Diego Costa, algo que rehusa la RFEF al entender que la excusa para el anticipo de la convocatoria es inválida porque el jugador no necesita visado de entrada en Estados Unidos ya que tiene pasaporte español.
La CBF, en todo caso, tiene derecho a reclamar ante la FIFA. Si lo hace, la Comisión del Estatuto del Jugador, de la que es miembro el vicepresidente de la RFEF, Juan Padrón, tendrá que fallar en el plazo máximo de dos meses, que sería de un mes si la FIFA decide que el caso lo estudie un juez único y no la Comisión.
Pero la RFEF ya tiene atados los cabos. El secretario general federativo, Jorge Pérez, que es quien ha llevado personalmente el Caso Costa, ha consultado todos los pasos con la FIFA, a la que ha enviado copia de la carta remitida a la Confederación Brasileña.