Redacción: Latribunamadridista.com
Pases cortos, a escasa distancia, al primer toque o a dos toques como máximos pero perfectos y precisos, como diría D. Alfredo, » cortitos y al pie», es una de las obsesiones de Rafa Benítez que entrenamiento tras entrenamiento, insiste a cada jugador exigiéndole la perfección y no dudando en parar, una y otra vez, el entrenamiento, cuando ve algo que no le gusta.
Y es que antes de potenciar, los pases en profundidad, Benítez quiere un Madrid de toque, en parte por la tremenda calidad que tienen sus jugadores e insiste, como si fuese un entrenador de fútbol sala, en la posesión del balón y en los pases cortitos, rápidos pero precisos, sin margen de error.
Sin duda, poco a poco, Benítez comienza a desvelar sus intenciones sobre su estilo de juego en este nuevo Real Madrid.