El Real Madrid había dejado lo mejor para este cuarto partido. Su primera parte fue la mejor del playoff y posiblemente de la Euroliga, no solo por el resultado (51-35) sino por las sensaciones que transmitió. Devoró literalmente al Panathinaikos, que aguantó el 19-14 de unos primeros 11 minutos titánicos de Ayón. El mexicano fue imparable en la pintura (8 puntos, 5 rebotes y 15 de valoración) y permitió a su equipo mandar en el ritmo de juego (25-16).
Ciclón blanco
Los griegos, desactivados Calathes y James, se encomendaron a un acertado Lojeski (7 puntos) para acercarse a tres puntos con el 27-24 (min. 14) y disminuir algo la euforia que empezaba a aflorar en un WiZink Center abarrotado. Pero no les sirvió de mucho porque el Real Madrid estaba muy metido en el partido. Con los de Pascual recuperándose, desplegó un juego coral en ataque y defensa. Empezó a anotar de fuera, que era lo único que faltaba, porque por dentro fueron una pesadilla para su rival con un ¡93% de acierto!.
Apareció Llull con dos triples seguidos, que levantaron a la afición al grito de «¡Llull, Llull, Llull!». Se unió Carroll con otros dos y Reyes tomó el testigo de Ayón bajo el aro. El capitán volvió a dar un recital. Sus siete puntos y un triple de Rudy culminaron seis minutos de escándalo en los que anotaron 24 puntos y desactivaron por completo al Panathinaikos, que se fue 16 abajo al descanso (51-35).
Quería más el conjunto dirigido por Laso. Doncic decidió que además de hacer jugar iba a anotar. Tres triples y máxima del Real Madrid. Panathinaikos se diluía en la enorme defensa blanca y no podía más que mirar la exhibición local con el 65-43 en el ecuador del tercer cuarto. Solo James inquietaba algo desde el 6,75, pero muy lejos de perturbar la armonía y solidez madridista, cuya ventaja no bajó de los 13 puntos. De ello se encargó Llull, con su tercer triple, Thompkins y un Ayón sumando en todos los apartados (4 asistencias y 3 robos) para entrar con +18 en el último cuarto (78-60).
Reacción visitante
El Panathinaikos creció en defensa y en el partido en un último cuarto asombroso. Sus continuos cambios atrás desestabilizaron el ataque blanco, que dio un bajón tremendo y no anotó sus primeros puntos hasta el minuto 33 con dos tiros libres de Taylor. Calathes y Singleton tiraron de los griegos con un parcial de 17-4 que dejaba perplejo a los presentes y les metía en el playoff (82-77, min. 37).
El capitán contiene y Doncic sentencia
En el momento más transcendental del partido y posiblemente de la eliminatoria salió al rescate Reyes (jugador ya con más partidos de playoff disputados de la Euroliga) con cinco puntos seguidos que neutralizaron las embestidas de un gran Calathes y aplacaron la remontada visitante. Pero hubo un último intento de los griegos con otro triple de Calathes que ponía el 85-82 a 1:26 para el final. Sin embargo, el jugador más valorado de la temporada, Doncic, respondió con un triple de campeón en el final de la posesión en el último minuto para el 88-82, que remataron dos grandes defensas de Rudy y Ayón dando el pase al Madrid a la Final Four (89-82, min. 40).