Redacción: realmadrid.com.
La visita al Málaga en la jornada 24 de la temporada 1973/74 fue el comienzo de una de las leyendas del Real Madrid. Camacho hizo su debut oficial y empezó a ganarse un puesto en el equipo que no perdería hasta su marcha en 1989. Luis Molowny fue el entrenador que le dio esta oportunidad cuando todavía tenía 18 años.
El murciano jugó 577 partidos con el Real Madrid y encandiló a la afición con sus demostraciones de coraje y seguridad defensiva. Integrante de una de las etapas más exitosas del club, coincidió con otros jugadores legendarios durante su carrera como Pirri, Santillana,Juanito o los integrantes de la Quinta del Buitre.
Una referencia para el vestuario y los jóvenes
Entre sus virtudes destacaba su carácter ganador, que le convertía en una pieza clave de la plantilla. Uno de sus admiradores esButragueño, que recuerda con cariño al defensa: “Aparte de su pureza y nobleza como profesional, tenía capacidad para agrupar y motivar al equipo en momentos difíciles. Él fue uno de los motores en aquellas remontadas históricas en la UEFA. Es uno de los veteranos de los que más he aprendido y respetado”.