ESPAÑA,PRIMER CONTACTO CON EL FRAPORT ARENA

Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista

El equipo español formado por Feliciano López, Fernando Verdasco, Roberto Bautista y David Marrero realizó su primera sesión de entrenamientos en la pista del Fraport Arena de Frankurt, donde se medirá a Alemania del 31 de enero al 2 de febrero en la primera ronda de la Copa Davis 2014.

España ya ha iniciado su camino hacia la sexta Ensaladera de su historia. Después del tropezón el año pasado ante Canadá a las primeras de cambio, que a la postre supuso tener que jugarse la permanencia en el Grupo Mundial de la Copa Davis ante Ucrania, los nuestros quieren comenzar el 2014 con buenas nuevas a nivel de equipo. Un grupo donde destaca una cara nueva, la del capitánCarlos Moyà, quien ya se ha vestido de corto para dirigir la primera sesión de entrenamientos en el escenario de juego, el estadio Fraport Arena de Frankurt con capacidad para 5.000 espectadores y habitualmente sede del equipo de baloncesto del Deutsche Bank Skyliners.

Moyà estuvo acompañado en todo momento porAlbert Costa, ex capitán del equipo español y actualmente director deportivo de la RFET. Los jugadores elegidos para la ocasión, véaseFeliciano López,Roberto Bautista,Fernando VerdascoyDavid Marrero, pudieron comprobar de primera mano la superficie de juego escogida por el equipo teutón (Rebound Ace), así como las pelotas con las que se disputarán los partidos (Dunlop Fort Tournament).

Alemania, pendiente de Haas
«Creo que sí podrá jugar, aunque mantenemos de momento el interrogante». El capitán alemán,Carsten Arriens, sigue pendiente de la evolución del que sería su número uno,Tommy Haas, que tuvo que abandonar su duelo de primera ronda del Open de Australia por problemas en el hombro derecho y que ha estado consultando a diferentes fuentes médicas sobre sus dolencias. mientras que el resto del equipo, véasePhilipp Kohlschreiber,Florian MayeryDaniel Brands, ya están a disposición del técnico, la duda de Haas, que no juega por su país desde las semifinales ante Rusia en 2007, mantiene en vilo a una afición que ya ha comprado todas las entradas a disposición de la federación germana.