Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista
Dani Carvajal es el símbolo de la cantera del Real Madrid. El 12 de mayo de 2004, puso con 12 añitos la primera piedra de Valdebebas junto a Alfredo Di Stéfano. Aquel chaval de Leganés con cara de travieso había llegado dos años antes a las categorías inferiores del club dispuesto a cumplir sus sueños. Pronto empezó a destacar y en seguida se convirtió en una de las grandes promesas de La Fábrica.
Mourinho aterrizó en Valdebebas en 2010 y apuntó su nombre en su agenda de trabajo. Quería que el lateral derecho del Castilla hiciese la pretemporada con el primer equipo en Estados Unidos, pero una imprudencia del jugador hizo que todo se fuera al traste. Un día antes del viaje, acudió a bañarse a un pantano con sus amigos y sufrió un corte en un pie con una piedra. Mourinho no se lo perdonó y nunca más volvió a contar con él pese a su gran rendimiento.
Carvajal se tuvo que marchar al Bayer Leverkusen para demostrar que podía jugar en el primer equipo del Real Madrid. Era una apuesta arriesgada que resultó ser ganadora. Tras una temporada excelente en la Bundesliga, el conjunto blanco ejerció su opción de recompra por 6,5 millones de euros. Vuelve ya sin Mou en el banquillo.
«Hoy es uno de los días más felices de mi vida, vuelvo a mi casa y a defender el escudo que corre por mis venas. Agradecer a Bayer 04 todo lo que me ha dado, y a todos los madridistas su apoyo durante todo el año. Hala Madrid», fueron las palabras de Carvajal al conocer la noticia. El niño que puso la primera piedra de Valdebebas ya está en el Bernabéu para triunfar en el Real Madrid.
