Redacción:Noelia Pinto Cervero-Latribunamadridista
Serena Williams, número uno mundial, con 16 títulos individuales de Grand Slam y cinco veces campeona en Wimbledon (defendía su título de 2012), cayó apeada en octavos de final por la alemana Sabine Lisicki, número 24 del ránking mundial WTA y forjada en la Academia de Nick Bollettieri, en Florida. Ahora la entrena su padre, Richard Lisicki. En los cuatro últimos años, Lisiscki siempre ha eliminado en Wimbledon a la vigente campeona de ese mismo año en Roland Garros.
La gran sorpresa se consumó tras dos horas y cuatro minutos ante las asombradas tribunas de la Centre Court, donde Lisicki dominó a Williams por 6-2, 6-1 y 6-4. La alemana lloró convulsivamente tras arrojarse de cabeza al pasto de la Central de Wimbledon… y aun seguía llorando cuando fue entrevistada por la BBC: “No puedo creer esto que ha pasado, aún no me lo creo. Mi primer set fue perfecto, pero Serena se recuperó después y jugó de modo increíble. No sabía que esto pudiera ocurrir”. En cuartos de final, Lisicki se medirá a Kaia Kanepi (Estonia), que apeó (7-6, 7-5) a la gran esperanza británica, Laura Robson.
En otro de los partidos de la jornada la puertorriqueña Monica Puig, cayó derrotada por la estadounidense Sloane Stephens, por 4-6, 7-5 y 6-1 en 2 horas y 4 minutos. Puig, de 19 años, llegaba al cuarto partido de esta edición de Wimbledon con confianza tras derribar por el camino a la quinta favorita, la italiana Sara Errani, a la española Silvia Soler y a la checa Eva Birnerova.
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