Redacción: Rubén López / LaTribunaMadridista.com
Imagen: Cadena SER
El Real Madrid hizo los deberes al vencer al Villarreal por 2-1, pero el Atlético de Madrid también hizo lo suyo por el mismo resultado ante el Valladolid en Pucela. El equipo de Zidane hizo soñar a su hinchada con la Liga tras remontar un 0-1 en los tramos finales, pero el resultado del otro campo no cambió. Finalmente, LaLiga se queda igual y el Atlético se proclama campeón. Los goles madridistas fueron obra de Benzema y Modric, mientras que el tanto del Villarreal fue obra de Yeremi Pino.
El técnico madridista, Zinedine Zidane, introdujo varias novedades en el once. Varane era titular en el día que podía ser su último partido como jugador merengue en detrimento de Nacho. Asensio era la otra sorpresa para el final liguero saliendo de inicio para formar con Benzema y Vinícius el tridente de ataque. El once que puso en liza Zidane fue el compuesto por: Courtois; Odriozola, Varane, Militao, Miguel; Casemiro, Valverde, Modric; Asensio, Vinícius y Benzema.
El míster del “submarino amarillo, Unai Emery, no se guardó nada pese a la final de la Europa League ante el Manchester United que se disputará en cuatro días. La mayor novedad estaba en la portería, Asenjo era suplente ocupando su lugar el argentino, Rulli. Otra de las sorpresas era la titularidad de Yeremi Pino en detrimento de Moi Gómez que lo estaba jugando todo. La alineación “groguet” fue la formada por: Rulli; Gaspar, Albiol, Pau Torres, Pedraza; Capoue, Parejo; Trigueros, Pino, Gerard Moreno y Bacca.
El partido comenzó muy igualado con ambos conjuntos yendo a por el partido y presionando muy arriba. Con el paso de los minutos el Real Madrid estaba muy incómodo y sin tensión, pareciendo que no se jugaba la Liga sin ninguna agresividad.
En el partido no sucedía nada, pero el Villarreal generaba una mayor sensación de peligro, rompiendo las líneas del equipo de Zidane muy fácil. El Real Madrid era un equipo muy largo y desordenado. El equipo castellonense supo aprovechar el mal inicio del conjunto local para abrir la lata. En el minuto 20 tras una jugada embarullada, el mejor jugador del Villarreal, Gerard Moreno, mejoró la jugada con un pase interior para Yeremi Pino que realizó un control exquisito para superar a Odriozola y batir en el uno contra uno a Courtois con un buen disparo.
La primera aproximación madridista llegó tres minutos más tarde del gol del canterano “groguet” a balón parado. Un libre directo botado por Modric fue finalizado por Asensio con un cabezazo muy arriba. El Real Madrid estaba cuajando un partido pésimo sin realizar ningún tiro a puerta en la primera media hora, únicamente disparos que no tuvieron ningún peligro sobre la meta defendida por Rulli.
En el minuto 24 llegó la jugada polémica del encuentro tras tocar el balón en la mano de Parejo, teniéndola muy despegada del cuerpo cortando la trayectoria del esférico. Penalti claro pero nuevamente el colegiado del encuentro no decretó el punto de penalti. Al Real Madrid le tocaba remar en un partido hasta el momento muy gris.
El equipo visitante estaba siendo muy superior al Real Madrid, viviendo muy tranquilo ante la inoperancia del ataque madridista. En el 29 nuevamente el Villarreal gozó de una buena ocasión en las botas de Capoue tras realizar una buena cabalgada para plantarse en el balcón del área y probar fortuna con un disparo muy desviado.
En el minuto 34 llegó la mejor aproximación del Real Madrid en el partido. El protagonista fue Luka Modric, donde el croata tras llevar a cabo una buena jugada individual y plantarse sólo en el interior del área mandó su disparo cerca de la portería de Rulli.
El Villarreal seguía a placer sobre el verde saliendo muy fácil de la presión madridista para plantarse en el área rival. No obstante, en la última jugada de la primera mitad pudo llegar el empate. Un saque de esquina botada por Modric fue rematado por Casemiro al segundo palo con un buen cabezazo, pero muy centrado siendo atajado sin problemas por Rulli. Con el resultado de 0-1 favorable al conjunto “groguet” se llegaba al descanso. El marcador en el otro partido trascendental por LaLiga era favorable al Valladolid por 1-0.
El Real Madrid en la segunda parte debía dar otra imagen muy distinta sobre el verde si quería tener opciones de conquistar su 35ª Liga. El tramo inicial del cuadro merengue en los segundos 45 minutos no auguraban ningún halo de esperanza, pero conociendo al equipo de Zidane, cualquier cosa era posible.
En el 51 llegaría la primera ocasión peligrosa del equipo local. Un buen centro lateral de Odriozola, el hombre más incisivo en las filas madridistas, fue cabeceado por Casemiro con un buen cabezazo que salió lamiendo el poste.
El Real Madrid seguía atascado en ataque, lo que motivó a Zidane a agitar la coctelera con un doble cambio. Vinícius y Asensio dejaron el campo por Isco y Rodrygo. En la jugada siguiente a los cambios, el equipo de Zidane anotó el tanto del empate, pero fue anulado por un fuera de juego milimétrico de Benzema que llevó a cabo un testarazo magnífico a centro de Casemiro.
Después de estas dos buenas aproximaciones al Real Madrid se le acabaron las ideas en ataque y le costaba llegar con peligro el área rival. No obstante, el equipo de Zidane consiguió acercarse sobre la meta de Rulli aprovechando los errores del “submarino amarillo”.
En el 66 una buena presión de Rodrygo sobre el portero “groguet” provocó su error para que Benzema dentro del área se plantara dentro del área en una buena posición, pero el francés perdonó el empate con un disparo muy defectuoso.
El Real Madrid nuevamente estaba perdido en el encuentro sin encontrar la fórmula de cómo generar peligro en la defensa rival. Zidane en el 67 efectuó un triple cambio en busca de la heroica y conseguir los tres puntos. Nacho, Mariano y Marcelo entraron al verde por Miguel, Odriozola y Casemiro. Sin embargo, desde el otro partido llegaban muy malas noticias, debido a que el equipo de Simeone había dado la vuelta al marcador con los goles de Correa y Suárez.
Zinedine Zidane con las tres sustituciones cambió de formación a un 3-5-2, introduciendo a muchos jugadores de perfil ofensivo. Los cambios no le dieron otro aire al Real Madrid, ya que no había ningún jugador para hacer llegar el balón a los jugadores de ataque, lo que provocó que el cuadro merengue fuera un equipo muy largo. El Villarreal tenía muchos espacios para hacer daño al contraataque, pero no estuvo certero para aprovechar todos los huecos que dejaba el equipo de Zidane.
En el 82 el equipo local estuvo a punto de lograr el empate en las botas de Modric al recibir un pase de Rodrygo, donde el croata desde la frontal probó fortuna con un gran disparo que se fue lamiendo el poste. El Real Madrid tenía muy pocas opciones de alzarse con el título, ya que el resultado en el otro choque seguía igual con el Atlético de Madrid venciendo por 1-2. Pero el equipo de Zidane sacó su garra para remontar el choque y creer hasta el final.
Los goles de Benzema en el 86 con un disparo magnífico directo a la escuadra y en el 91 de Modric dieron vida al Real Madrid que consiguió hacer sus deberes, pero el Valladolid no logró el empate que le daba LaLiga al equipo merengue. Final angustioso para el equipo blanco que luchó hasta el final a pesar de todas las dificultades de la temporada, pero no pudo ser. Ahora toca poner el foco en la remodelación de la plantilla para la temporada que viene y poder optar por todos los títulos.