Redacción: Álvaro Quetglas/ La tribuna madridista
El Real Madrid de Julen Lopetegui afrontaba la primera salida complicada en Liga. La visita al Athletic Club era el primer rival de exigencia para los blancos. El partido estuvo muy disputado donde ambos equipos lo dieron todo para sacar los tres puntos. El conjunto vasco se adelantó en el marcador gracias a un tanto de íker Muniain en una jugada donde el jugador del Athletic remató prácticamente en la línea de gol, donde Courtois no pudo hacer nada. Con la ventaja en el marcado, el Athletic pudo rematar al Real Madrid, pero no lo hizo y cuando dejas con vida al club blanco, normalmente, suele pasar lo que sucedió.
El Real Madrid, tras ir por debajo en el marcador, fue a por el empate. Y lo consiguió. Precisamente, fue uno de los jugadores que no salieron de inicio el que puso el 1-1 en el electrónico. El malagueño, Isco Alarcón, logró superar al guardameta del Athletic- que estaba haciendo un gran encuentro-, para que el conjunto merengue saliese de su visita al estadio de San Mamés con un punto que, tras estar por debajo en el marcador, el conjunto de Lopetegui no regresa a la capital de España de vacío.
Sergio Ramos, al final del choque, fue el futbolista del Real Madrid en hacer las declaraciones a pie de campo. El de Camas, a pesar de ser consciente de la dificultad que siempre conlleva jugar en un estadio como el de San Mamés se mostró insatisfecho con el resultado final.. «El empate nunca es bueno. Hay cosas que mejorar» fueron las palabras que el central dijo al periodista de Movistar +.
Tras este choque, el conjunto merengue ya piensa en su próximo objetivo: el debut en Champions League ante la Roma el próximo miércoles. Un partido importante pues es el estreno en la máxima competición europea en esta temporada donde los blancos seguro que querrán conseguir los tres puntos, comenzando así con buen pie la Champions donde, por tercer año consecutivo, el conjunto de Concha Espina defiende título.