Redacción María Luz Domínguez
No podía comenzar mejor la andadura copera para el Real Madrid tras conseguir la victoria por 89 a 84 ante un Unicaja de Malaga muy duro en un partido que estuvo igualado hasta el final. Los blancos hicieron un partido muy serio y no fallaron en los momentos finales. Campazzo lideró al Madrid con 18 puntos y 33 de valoración.
Duelo por todo lo alto para el segundo partido de la Copa del Rey en Gran Canaria. El Real Madrid salía a cancha muy colocado y sobretodo dando mucha circulación de balón lo que facilitaba los tiros desde el perímetro. Caseur era el protagonista de los primeros compases del partido anotando con facilidad en entradas a canasta. Díez y Salin daba la respuesta en el equipo de Málaga y la igualdad era la constante al final del primer cuarto (26-23 min. 10). En el segundo periodo el Real Madrid ponía un punto de velocidad mas haciendo un buen parcial de 8-0. Rápido reaccionaba Unicaja, especialmente acertados sus jugadores desde el 6,25. Los de Plaza se ponían por delante en el marcador lo que obligaba a Laso a parar el partido y a rotar jugadores. La salida a cancha de Campazzo hacía despertar al Madrid y anotar 10 puntos sin respuesta del equipo andaluz. Los blancos se iban uno arriba al descanso (46-45 min.20)
Tras el paron el encuentro volvió a estar igualado. Unicaja entraba de nuevo en el partido y no dejaba que el Madrid ampliase ventaja pese a las buenas acciones de Thompkins. McCallum daba al Unicaja una ligera ventaja en el luminoso al final del tercer periodo (64-66 min.30) Visto lo visto en el parquet cualquier cosa podía pasar en los últimos diez minutos. El partido no tenia dueño. Los triples de Waczynski hacían que el Real Madrid tuviera que remar y no cometer fallos. El partido cada vez mas trabado no estaba nada fácil para los madridistas. La salida a cancha de Rudy y las acciones de Campazzo hacían remontar al Madrid la ventaja de Unicaja y empataban el partido a 2 minutos del final. El alto nivel de ambos equipos presagiaba un final para aquel que no supiera gestionar bien las posesiones. Unicaja se atascaba en ataque y el triple de Thompkins y los dos libres que sumaba Tavares daban al Madrid una ventaja que podía valer un partido a menos de un minuto para el final. Nedovic anotaba desde la línea de tripes y ponía dos a su equipo. Los dos tiros anotados por Campazzo tras robar el balón daba al Madrid una ventaja de cinco puntos y una victoria que daba un pase a semifinales.(89-84)