Redacción: realmadrid.com
Partidazo con letras mayúsculas en el Palacio de los Deportes o WiZink Center entre los dos mejores equipos de Europa, Real Madrid y CSKA de Moscú, gran baloncesto lógicamente en la mejor competición posible, la Euroliga, una Euroliga donde el Real Madrid ha comenzado con victoria tras su triunfo en Estambul ante Analou Efes.
Histórica rivalidad que se remonta a 1963, 16 Copas de Europa entre ambos (9 blancas y 7 rusas)… pero, sobre todo dos equipazos que calibrarán sus fuerzas en un encuentro que bien pudiera repetirse con el título en juego. Real Madrid y CSKA marchan en lo alto de la clasificación gracias a las victorias en sus respectivos debuts ante el Andolu Efes (74-88) y Olimpia Milán (93-84).
Real Madrid y CSKA llegan en similares condiciones. Intratables en sus ligas y exhibiendo su gran potencial ofensivo. Los blancos se fueron a 88 puntos a domicilio en Estambul (90 de media en Liga) y cuentan con un repertorio en ataque con el que pocos equipos pueden competir. Doncic, en una pasada semana espectacular, Randolph, Ayón y Causeur están siendo los referentes. Rudy añadirá mayor rotación todavía y Randle se estrenará ante la afición. Pero es una cita en la que necesitarán la mejor versión de todos.
La defensa, a prueba
Si hay alguien capaz de estar a ese nivel en ataque son los rusos. La llegada del exmadridista Sergio Rodríguez para paliar la baja de Teodosic mantiene su poder creativo, y junto con la del alero norteamericano Clyburn dotan a la línea exterior de un gran poder de anotación. De Colo y Higgins completan un cuarteto de enorme calidad (anotaron 75 de los 93 puntos ante el Olimpia Milán).
Juego interior
Es, quizás, el factor en el que el Real Madrid puede marcar las diferencias. La clave será igualar la intensidad de unos interiores muy físicos como Hynes, Kurbanov y el exmadridista Hunter, y prestar atención a la muñeca de Vorontsevich. El Madrid se impuso con claridad en el mismo enfrentamiento de la temporada pasada (95-85).