Redacción: realmadrid.com.
Arranca una nueva edición de la Copa de Campeones, de la que saldrá el mejor equipo Juvenil de España. Un título que ya lograron en anteriores ediciones varios madridistas, que quisieron apoyar al filial blanco en esta fase decisiva de la temporada. Álex, Óscar Plano, Lucas, Mosquera, Mateos, Álvaro López, Kamal, Sobrino, Molero, Pacheco y Toril analizaron la competición que acogerá la ciudad de Vigo del 6 al 11 de mayo y aconsejaron a los canteranos dirigidos por Ramis. “Es el último año de juvenil y es el mejor torneo que hay a nivel de cantera, el que tiene más repercusión y que exige una máxima intensidad, atención y presión. Es un gran escaparate donde hay jugadores de nivel. El equilibrio entre cuándo hay que estar al cien por cien y cuándo hay que soltar esa presión es la clave”, señaló Toril, técnico del último juvenil que se proclamó vencedor en 2010.
Ha llegado la hora de la verdad para el Juvenil A dirigido por Ramis. El gran trabajo y compromiso exhibidos a lo largo de la campaña han tenido su recompensa y la próxima semana debutarán en la Copa de Campeones ante el anfitrión, el Celta de Vigo. Un torneo que ya han vivido en primera persona varios jugadores del Castilla, como Álex Fernández, para el que fue “una de las mejores experiencias que he tenido y el paso previo a ser profesional. Representar al Real Madrid, que es el mejor club del mundo, y ser campeón de España con él es lo mejor que te puede pasar como canterano”. Su compañero Óscar Plano vivió esa experiencia junto a él: “Fue un orgullo porque el Madrid llevaba muchos años sin ganar este torneo. Esa competición es un prestigio para nosotros”. Para Molero, jugador del Real Madrid C, tuvo el mismo significado: “Es un torneo que a todo el mundo le gustaría jugar. Defender el escudo y además ser campeón te enorgullece”.
Su compañero Álvaro López también formaba parte del último juvenil que levantó la Copa de Campeones en la temporada 2009/10. El canterano les trazó el camino para lograr el triunfo: “Hay que salir concentrados y ayudarse el uno al otro para ser un equipo”. En esa misma línea, Lucas completó: “El secreto estuvo en el grupo que formábamos porque éramos amigos y eso lo trasladamos al campo. Esa fue una de las claves”. Sobrino, en cambio, fue claro y directo: “Las finales no se juegan, se ganan”. La Copa de Campeones exige una gran intensidad por parte de los jugadores durante dos eliminatorias en las que competirán con dos rivales que determinarán su presencia en una exigente final. Por eso mismo Kamal les aconsejó “que pase lo que pase se lo jueguen todo y vayan a por la victoria desde el principio”. Por su parte, Pacheco reconoció que «no es fácil porque todos los equipos que han llegado ahí tiene un nivel muy alto. Hay que salir muy concentrado, los pequeños detalles son fundamentales. No sería justo que con la gran temporada que llevan, por pequeños detalles no puedan conseguir su objetivo».
Siete años atrás, los jugadores del Castilla Mateos y Mosquera pudieron vivir en primera persona la disputa de este torneo, en el que el Real Madrid es el que más veces ha logrado el título. Han pasado muchos años desde esa fecha, pero para Mateos fue especial y tiene claro que los de Ramis triunfarán: “Es un torneo muy bonito y merece la pena luchar por él. Jugando como siempre lograrán el objetivo”. Mosquera les señaló las pautas a seguir: “Teníamos muy buen ambiente, estábamos muy unidos y ese es el factor común entre todos los equipos que lo hemos ganado. El campeonato es complicado, pero tienen calidad de sobra y van a dar la talla”
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